Chihuahua.— La viuda del exdiputado federal Carlos Hermosillo Arteaga, Mayra Julieta Urbina Arzola, fue detenida y presentada ante un juez por el delito de enriquecimiento ilícito durante sus actividades como funcionaria pública en el DIF estatal, en la administración del priista César Duarte Jáquez.
Después de ampararse para evitar ser detenida en 2017 y diferir cinco audiencias, Urbina Arzola fue arrestada el pasado domingo en la ciudad de Durango, Durango, y presentada ayer ante un juez en Chihuahua por el desvío de 58 millones de pesos del DIF estatal, bajo la causa penal 835/2019.
En el marco de la operación Justicia para Chihuahua, Hermosillo Arteaga y Urbina Arzola fueron investigados y se les atribuye el incremento injustificado de su patrimonio, lo cual se vio reflejado en depósitos a sus cuentas bancarias, adquisiciones de fincas y vehículos.
Cabe señalar que Urbina Arzola fue citada a diversas diligencias ministeriales y judiciales y no compareció. Asimismo, un juez de Control embargó a la imputada una serie de fincas en zonas residenciales, joyas y vehículos de lujo por un valor cercano a los 25 millones de pesos.
Hermosillo Arteaga y Urbina Arzola fueron una pareja muy cercana al exgobernador Duarte, y ambos colaboraron en áreas del gobierno durante la administración del priista hasta finalizar su sexenio. Para entonces, Hermosillo Arteaga había ganado la diputación federal por el distrito 09 con sede en Parral.
Mientras ostentaba este cargo, el 20 de marzo de 2017, Hermosillo Arteaga perdió la vida en un accidente automovilístico, mientras viajaba en compañía de su esposa y cuatro hijos por la vía corta a Parral.
Al momento de su muerte y con el fuero de legislador federal, Hermosillo Arteaga era investigado por la fiscalía del estado y la entonces Procuraduría General de la República (PGR) por los delitos de enriquecimiento ilícito, peculado y uso indebido de funciones.
Tras su deceso, la fiscalía continuó con las investigaciones, por lo que realizó múltiples cateos en las propiedades a su nombre, mismos en los que se incautaron varios objetos de valor, entre ellos, una colección de relojes con un valor superior a los 130 mil dólares, dos casas, dos granjas, tres vehículos de lujo y motocicletas deportivas.
Estas propiedades, sumadas a las de su esposa, sobrepasaban considerablemente el monto de sus salarios, incluso por décadas.