Autoridades de Puebla interrumpieron en sesión del cabildo de San Martín Texmelucan y detuvieron al secretario de Gobernación, Marco Antonio Cruz Ávila y directora del Centro de Monitoreo, Sandra López Olvera.
Los arrestos forman parte de las investigaciones que realiza el gobierno del estado, luego de que el 2 de mayo tomó el control de la seguridad del municipio y más de 100 policías fueran acusados por el delito de usurpación de funciones.
La sesión de cabildo se realizaba a puerta cerrada cuando llegaron elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE), que directamente fueron por los funcionarios municipales.
El alcalde de Texmelucan, Rafael Núñez Ramírez, señaló que la respuesta del gobierno estatal es tardía para garantizar la seguridad de la región.
Argumentó que la detención del secretario de Gobernación y directora del Centro de Monitoreo, se realizaron sin presentar una orden de cateo u orden de aprehensión.
“Consideramos injusto e ilegal que muchos de los detenidos hayan incluso arriesgado su vida a favor de nuestras familias y ahora estén privados de su libertad, sin considerar su legitimo principio de presunta inocencia”.
Tras estas detenciones, el gobernador Antonio Gali Fayad, señaló que se investigan a todos los funcionarios municipales de San Martín Texmelucan, por posibles hechos delitos.
No confirmó si el alcalde estaría vinculado en algún hecho delictivo, pero reiteró que en Puebla se hará valer la justicia para evitar actos de corrupción y hechos delictivos.
“Hasta donde llegue la mano de la justicia para limpiar a un municipio que estaba siendo azotado por la violencia. Reitero, los 217 presidentes municipales tienen en el gobernador un aliado, amigo y consejero para orientarlos en los temas de seguridad”.
El 2 de mayo el gobierno poblano tomó el control de la seguridad de Texmelucan, caracterizado por el robo de combustible y descubrimiento de cuerpos desmembrados.
Fue la Secretaría de Seguridad Pública quien interrogó a 135 policias municipales; la mayoría incurrió en la usurpación de funciones y fueron trasladados al CERESO de Tepexi de Rodríguez, y sólo 15 quedaron en libertad.
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