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Sayula de Alemán.— Mientras elementos del Instituto Nacional de Migración (INM) continúan con una estrategia de captación de extranjeros de la caravana con el ofrecimiento de visas humanitarias, en Coatzacoalcos fueron detenidos más de 400 centroamericanos que viajaban hacinados en dos tráileres.
Los migrantes viajaban sofocados en los contenedores cuando fueron detectados por autoridades de seguridad en los límites de Coatzacoalcos e Ixhuatlán del Sureste, cerca de donde se mueve la primera caravana.
Primero, los centroamericanos fueron trasladados a las oficinas de la Agencia de Investigación Criminal de Coatzacoalcos, donde las autoridades los mantuvieron en el patio de sus instalaciones, luego fueron trasladados a la Estación Migratoria de Acayucan, donde quedaron en custodia del INM.
“Eran arriba de 400, no me había tocado ver tantos en un sólo evento”, afirmó Tonatiuh Hernández Sarmiento, integrante de la Comisión de los Derechos Humanos de Veracruz tras acudir a checar sus condiciones.
Según dijo, en el grupo había menores, mujeres embarazadas y personas enfermas.
Crece deserción
Cansados y enfermos, 80% de los migrantes de la caravana han desertado en territorio de Oaxaca y Veracruz.
Los agentes de Migración han estado presentes durante todo el trayecto de la caravana y, de acuerdo con su información, en territorio oaxaqueño consiguieron que 50% del contingente se acogiera a las tarjetas de visitantes por razones humanitarias.
Los agentes del INM se instalan en retenes en cada población o punto de descanso de la caravana y abordan a los extranjeros; de acuerdo con lo constatado por EL UNIVERSAL, primero intimidan a los migrantes y los asustan sobre los peligros que van a enfrentar en el camino.
También los alertan sobre posibles engaños de los dirigentes de la caravana, para luego ofrecerles agua, comida y una de las tarjetas verdes que tienen una duración de año en el territorio nacional.
Con información de AP
