Culiacán.— En los tres primeros meses de 2018, la tasa de desocupación laboral en Sinaloa fue de 2.4%, menor al promedio nacional, de 3.1%, y la más baja para el estado en la última década, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Las cifras anteriores coinciden con las emitidas por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), cuyos registros dan cuenta de que la tasa alcanzada en el primer trimestre es históricamente la más baja reportada en esta entidad.
El mercado laboral en Sinaloa ha mejorado de manera significativa, debido a las acciones que se han desplegado, tanto a nivel nacional como internacional, para atraer inversiones, así como a la estrategia de promoción turística y la creación de infraestructura que ha arrojado resultados significativos, se informa.
Además, se toma en cuenta la política estatal en materia de desarrollo social que ha tenido un efecto positivo en el bienestar del trabajador y sus familias, como lo reconoce la organización no gubernamental México ¿cómo vamos?, que expresa que la pobreza laboral en la entidad se redujo en el periodo de enero a marzo de este año.
Esta organización publica el indicador de pobreza laboral, en el cual se consigna que a nivel nacional el porcentaje de la población que no puede adquirir la canasta alimentaria es 39.1%, mientras que en Sinaloa el porcentaje es 22.5%, se menciona.
Con esta cifra del primer trimestre, México ¿cómo vamos? ubicó a Sinaloa como la segunda entidad federativa con la menor pobreza laboral en el país, sólo superado por Baja California, se especifica.
La pobreza laboral es una situación en la que el ingreso laboral de un hogar no es suficiente para alimentar a todos sus miembros y disminuye a medida que crece el ingreso del hogar o bien se accede a transferencias o programas sociales que permiten a sus miembros acceder a bienes y servicios que por sí solos no tienen capacidad.
Este es el caso de los programas como: Te Queremos Sana; Becas Educativas y de Transporte; Apoyo de Material de Construcción; Despensas Alimenticias; Empleo Temporal en Campos Pesqueros; Comedores Comunitarios; Uniformes Escolares, entre otros, que permiten incrementar el bienestar de los hogares en el corto plazo.