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Juchitán.— El Instituto Nacional de Migración (INM) desmanteló la caravana de al menos 2 mil migrantes que ya habían llegado a Tonalá, Chiapas, tras haber iniciado la caminata sobre la carretera costera desde Tapachula, el pasado 20 de noviembre.
Los agentes migratorios llegaron el sábado a la Unidad Deportiva de Tonalá, donde descansaban los migrantes, y les ofrecieron la Forma Migratoria Múltiple (FMM), documento que les autoriza permanecer legalmente en el país durante 20 días.
El activista y defensor de los migrantes, Luis Rey García Villagrán, dijo que ese documento es una trampa que sólo busca desmantelar la caravana para que no se vea a los indocumentados caminando en las carreteras, porque “¿qué pueden hacer en 20 días?”.
“Si los migrantes van caminando es porque no tienen dinero y sin dinero, ¿a dónde irán en 20 días? Además, la FMM que les dieron tiene una vigencia de hasta 180 días, ¿por qué les dan sólo 20 días? ¿Qué podrán hacer en 20 días sin dinero?, cuestionó.
El director de Pueblos Sin Frontera (PSF), Irineo Mujica, dijo que México reacciona a las presiones de Donald Trump.
“Presidenta Claudia Sheinbaum no subestime a la administración de Trump que es letal. Será muy cruel para la comunidad migrante y para México. No minimice y prepárese con un plan. Serán años oscuros”, dijo.
A través de redes sociales se emitió una nueva convocatoria anónima para organizar otra caravana de migrantes desde Tapachula, que prevé salir este lunes. Los migrantes insisten en querer llegar a Estados Unidos antes de que asuma Trump, el 20 de enero.
