Nuevo Laredo.— Con balaceras, quema de vehículos y bloqueos de las principales avenidas amanecieron los habitantes de Nuevo Laredo. La violencia se desató tras la captura de Juan Gerardo Treviño Chávez, alias El Huevo, máximo líder del Cártel del Noreste.
La detención estuvo a cargo de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que realizaba un operativo en la colonia Hidalgo, de esta ciudad fronteriza, según se dio a conocer en un comunicado.
En las horas posteriores a la detención, elementos de Sedena fueron objeto de 35 agresiones de criminales. En uno de los ataques, una camioneta blindada ingresó disparando al interior del cuartel militar en Nuevo Laredo, informaron fuentes federales.
Hombres armados incendiaron tráileres y bloquearon al menos cuatro avenidas; también balearon las instalaciones militares y el edificio del Instituto Electoral de Tamaulipas.
Ante estos hechos, el Consulado de Estados Unidos emitió alerta de seguridad para sus connacionales, así como el aviso de la reprogramacion de las citas para este día lunes 14.
“Vivimos más de tres horas de terror, fue como tener una guerra en el patio de la casa porque incluso podíamos escuchar el sonido de las balas al pasar, ya que vivimos a dos calles del Consulado de Estados Unidos. Nos la pasamos tirados en el suelo”, relató a EL UNIVERSAL una familia que pidió el anonimato.
Indicaron que tenían el temor de que algún delincuente ingresara a su domicilio y en los próximos días se impondrán un toque de queda.
“Tenemos miedo, ayer en redes sociales dijeron que no saliera nadie, que la situación se iba a poner fea. Nos vamos a imponer el toque de queda por seguridad. Sabemos que en una situación así lo mejor es estar en casa, no arriesgarse. Es muy triste tener que pasar por esto, pero no está en nuestro alcance ni en el de las autoridades porque son cosas que se les van de las manos”, señalaron.
Juan Gerardo “N”, El Huevo, fue detenido en posesión de dos armas de uso exclusivo del Ejército. Hay en su contra tres órdenes de aprehensión: una en Tamaulipas, por extorsión y asociación delictuosa; otra en Coahuila, por homicidio doloso y terrorismo, y una más con fines de extradición por conspiración por tráfico de drogas y lavado de dinero.
Es señalado como líder de la organización criminal del Cártel del Noreste y del grupo de sicarios Tropas del Infierno.
Tras su captura fue trasladado a las instalaciones de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada para ser puesto a disposición del agente del Ministerio Público Federal y determinar su situación jurídica.