La Paz.— La población de enfrenta grandes desafíos en el estado más árido del país, con 97.5% de su territorio seco, por lo cual la Universidad Autónoma estatal desarrolla una investigación para fortalecer la agricultura ante la escasez de lluvias.

Al ser considerado este año “anormalmente seco”, por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), es necesario invertir en ciencia, innovación y tecnología y aprovechar el contexto desértico para producir cactáceas con un bajo requerimiento hídrico y de gran ayuda para el sector ganadero.

Entrevistado por EL UNIVERSAL, Gregorio Lucero Vega, profesor investigador del Departamento Académico de Agronomía de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), explicó que realizan investigación y vinculación con autoridades y productores para informarles del potencial del nopal forrajero como alternativa para la alimentación animal, con un importante ahorro de agua.

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La tierra del estado es propicia para sembrar nopal forrajero, el cual es una alternativa para la alimentación animal, señaló la UABCS. Foto: Especial
La tierra del estado es propicia para sembrar nopal forrajero, el cual es una alternativa para la alimentación animal, señaló la UABCS. Foto: Especial

“Tenemos investigación avanzada para identificar las especies de nopal forrajero que se pueden producir en BCS y ayudar al sector ganadero con los estragos de la sequía. Para dimensionar: una hectárea de alfalfa produce 200 toneladas por año y una de nopal hasta 300 por año, pero la diferencia radica en que la alfalfa necesita 16 mil metros cúbicos de agua en un año y el nopal sólo 250 milímetros. Con lo que se riega una hectárea de alfalfa se riegan 8 de nopal”, precisó.

Indicó que el nopal forrajero, producido en otras regiones de México, ha sido exportado a países como Brasil, donde ha resultado muy exitoso. Además, se ha logrado identificar el proceso para aumentar los niveles de proteína y que ayuden al ganado.

El grupo de investigadores universitarios se encuentra trabajando con agricultores cooperantes para utilizar incluso agua tratada en la producción de nopal forrajero. Así, habría un ahorro adicional, pues no sería “agua blanca”, sino de segundo uso. “Será una ventaja adicional”, expresó.

“Se trata de lograr alternativas para ahorro de agua, producción de alimento para ganado y para seres humanos y, que a su vez, represente una alternativa de negocio para agricultores. Gastando un décimo del agua [que hoy gastan] se puede obtener el mismo valor de producción si se dedica esa agua al cultivo de cactáceas. En Baja California Sur debemos especializarnos en cactáceas, estamos en una zona que lo amerita, que haya investigación y producción”, enfatizó.

Otra producción que están impulsando es la Pitahaya “Fruto del Dragón”, que llega a pesar hasta 500 gramos y es de un alto valor en el mercado, debido a que ronda los 80 o más pesos por kilogramo.

“Crece muy rápido y es considerado un fruto gourmet. Estamos en propagación de material vegetativo para pasar a áreas más grandes. Esta fruta es de exportación (...) otros sitios de México, como Puebla y Querétaro, la exportan a Estados Unidos. Incluso, Israel ha tenido mucho éxito con la Pitahaya llevada desde América”, comentó.

Al ser una zona árida, el estao tiene un alto potencial para el desarrollo de cactáceas que sirvan a la alimentación animal o bien, para la producción de frutos gourmet; sin embargo, está rezagado, refirió el profesor.

“Somos más y contamos con la misma cantidad de agua. Y nos hemos quedado un poco atrás. En (...) Puebla o Zacatecas les han sacado mucho provecho a las cactáceas. Nosotros queremos impulsar este conocimiento en cactáceas para beneficio de los productores. Que se cree un nicho económico, que empresarios inviertan y a la vez ahorren agua”, indicó Lucero Vega.

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Comentó que huertos de este tipo podrían ser atractivos como parte de actividades de ecoturismo, como en otras partes donde los turistas recorren los campos, cosechan las hortalizas y preparan sus alimentos.

En otras investigaciones y sistemas desarrollados por el investigador se encuentra la “columna vertical de arena”, un sistema hidropónico para mejorar la productividad y calidad de los cultivos con uso eficiente del agua.

Especies como lechugas, espinacas, rábanos, cebollas y chiles, incluso aromáticas, pueden cosecharse a través de este sistema que controla la temperatura del entorno de las raíces y hace óptimo su crecimiento.

Impulsar la agricultura de traspatio a través de este sistema contribuye a la economía familiar, autoconsumo y ahorro de agua.

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