Tijuana.— Ese día, el 23 de agosto, Servando se fue a trabajar a la maquiladora , igual que los últimos 10 años. Entró a una junta y al salir envió un último mensaje, después de eso nadie más supo de él.

Un caso inédito, incluso en un estado con más de 17 mil reportes por desaparición, según información de los .

Para la Fiscal en Baja California, María Elena Andrade, es como si se hubiera esfumado. Su celular, hallado en las inmediaciones de la maquiladora, fue clave para encontrar una respuesta sobre su posible ubicación, aunque hasta ayer nadie sabía dónde está. De lo que tienen certeza las autoridades es que jamás salió por su propio pie de su centro de trabajo.

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Colectivos de buscadoras han apoyado a Wendy en la búsqueda de su esposo en Tijuana. Foto: Aimee Melo | El Universal
Colectivos de buscadoras han apoyado a Wendy en la búsqueda de su esposo en Tijuana. Foto: Aimee Melo | El Universal

La desaparición de Servando, jefe de mantenimiento en una de las empresas de producción más grandes de Tijuana, con más de 5 mil empleados, estaría vinculada con delitos federales, como delincuencia organizada.

La principal línea de investigación, de acuerdo con la fiscal María Elena Andrade, apunta a una red de empleados de la misma compañía coludidos para cometer delitos. Esta red estaría vinculada con el robo de material de la empresa dedicada a la limpieza de rines, que estarían vendiendo de manera ilegal.

La búsqueda de Servando resultó en la detención de dos compañeros de trabajo —un gerente del área de mantenimiento y un ingeniero—. Para dar con ellos personal de la fiscalía analizó más de 3 mil horas de video de 140 cámaras, realizó más de 80 entrevistas y llevó a cabo un operativo de búsqueda con agentes caninos K9 en las cinco plantas industriales de la maquiladora.

Una hora perdida

“Te voy a encontrar y llegaré hasta las últimas consecuencias. Te amo Servando Salazar y mi corazón me dice que estás bien”, escribe Wendy Bravo, esposa de Servando y madre de sus tres hijos y un cuarto en camino.

Ese 23 de agosto, Servando llegó a Prime Wheel. Tuvo una reunión de trabajo que terminó cerca de la una de la tarde. Envió un mensaje a un proveedor, le pedía tiempo para ir a comer, en la puerta de la empresa lo esperaban un guardia y otra persona, pero jamás salió.

Cuando terminó su turno de trabajo y no llegó a casa, Wendy llamó al celular de su esposo, de conocidos; hizo todo lo que hace cualquier persona desesperada por encontrar a la gente que quiere. Al no tener noticias presentó su reporte ante la fiscalía.

Hasta el tercer día de la desaparición, el 26 de agosto, agentes de la Fiscalía General del Estado llegaron por primera vez a la maquiladora para un operativo de búsqueda. Llevaron agentes caninos y peinaron las instalaciones en una movilización que terminó a la una de la madrugada del día siguiente, y continuó a las 6 de la mañana.

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Para ese entonces el vehículo de Servando había sido identificado en el mismo lugar donde lo dejó estacionado, su celular fue encontrado en un centro comercial cercano, a unos 40 minutos caminando. La mujer que lo tenía en su poder dijo que lo halló tirado en la calle.

Wendy lo revisó y encontró ese último mensaje que fue clave. Era la 1:26 de la tarde del viernes 23 de agosto cuando Servando mandó un mensaje y aún estaba en la empresa, no había pasado ni una hora cuando ya nadie sabía nada de él. Esa hora perdida, sin que ninguno de los más de 5 mil compañeros de trabajo, las cámaras de seguridad ni nada ni nadie, dieran una pista de su paradero.

Los colectivos de búsqueda, como la Fundación Érik Carrillo, se unieron a la búsqueda y salieron a peinar los alrededores de la maquiladora acompañados de Wendy. Mientras, los agentes de la fiscalía analizaban con herramientas de geolocalización la información dentro del celular, así como las más de 3 mil horas de video en su poder.

La búsqueda arrojó evidencia importante: rastros de sangre y la ubicación de una camioneta Jeep, en la misma plaza comercial donde fue encontrado el celular de Servando. La unidad es propiedad de un gerente del área de mantenimiento de Prime Wheel.

Eso fue suficiente para pedir una orden de aprehensión en contra del gerente y un ingeniero, también de la compañía. Ambos fueron presentados ante el juez el 1 de septiembre y se les imputaron cargos por el delito de desaparición forzada, además de prisión preventiva como medida cautelar. Este jueves 5 de septiembre, está programada la audiencia de vinculación a proceso.

Mientras, Wendy Bravo intenta cuidar su embarazo e insiste en la búsqueda de Servando y la verdad de lo ocurrido.

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