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Culiacán.— El gobernador Quirino Ordaz Coppel solicitó la declaratoria de emergencia para el municipio de El Rosario, uno de los más afectados por las lluvias asociadas a la tormenta tropical IVO, que obligaron el desalojo de 56 familias en Mazatlán, provocaron un socavón en la maxipista Culiacán-Mazatlán e incomunicaron a varios poblados.
Durante una visita de inspección por las colonias Jacarandas, Lico Velarde, 20 de Noviembre, entre otras afectadas de Mazatlán, por el desbordamiento del arroyo de Jabalines, el gobernador dispuso de programas sanitarios.
Además, dio a conocer que se implementarán programas emergentes para atender a las familias afectadas por las lluvias —que en este puerto alcanzaron 80 milímetros— y buscará apoyos para pequeños negocios que resultaron dañados.
En el municipio de El Rosario, el alcalde Manuel Antonio Pineda Domínguez reseñó que las fuertes precipitaciones, que alcanzaron los 240 milímetros, causaron estragos en la infraestructura y en puentes viales, muchos de ellos, con afectaciones desde el huracán Willa.
Ordaz Coppel informó que solicitó al gobierno federal la declaratoria de emergencia para este municipio, donde se tienen daños por desbordamientos de arroyos y el crecimiento del caudal del río Baluarte.
Mientras, en el municipio de Elota, en los carriles de sur a norte de la maxipista Mazatlán-Culiacán se abrió un socavón a causa del desbordamiento de un arroyo, por ello, la circulación fue cerrada.
Los reportes de Protección Municipal establecen que con el desbordamiento de drenes que atraviesan parte del casco urbano y del cruce del arroyo de Agua Amarga, las comunidades de Pueblos Nuevos y Potrerillo quedaron aislados.
Juan Alfonso Mejía, secretario de Educación Pública y Cultura del estado, dijo que se mantiene la suspensión de clases en los 18 municipios en el turno vespertino.
Apuntó que la Universidad Autónoma de Sinaloa se sumó a esta medida ante los pronósticos de que las lluvias, asociadas al fenómeno natural que se tiene en las costas del Pacífico, continuarán en el estado.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ubicó el fenómeno natural al suroeste de la península de Baja California, cuyas bandas nubosas pueden generar nuevas lluvias, en el norte del estado y, de más baja intensidad, en el centro y sur.
