Monterrey.— La Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Nuevo León (CEDHNL) advirtió que los internos de los penales de la entidad son explotados laboralmente al ser obligados a trabajar jornadas de 10 horas, sin recibir prestaciones como seguro médico y pago de aguinaldo.
Al dar a conocer un diagnóstico sobre la situación en los cinco centros penitenciarios del estado, correspondiente a los años 2018 y 2019, Sofía Velasco Becerra, presidenta de la CEDHNL, advirtió que las condiciones que prevalecen en los penales no permitirían una adecuada reinserción social de las personas privadas de la libertad.
Indicó que en el penal de Apodaca, 37% de los internos trabajan para empresas; 20% en el de Cadereyta, y 37% en el femenil, aunque adicionalmente algunos realizan actividades de autoempleo que les permiten mantenerse ocupados, pero esto no los capacita y forma para que puedan enfrentar su vida al salir.
Explicó que el diagnóstico comprende desde enero de 2018 hasta mayo del presente año, cuando existía una población penitenciaria de 6 mil 634 internos, 78% de la capacidad del sistema estatal que era para 8 mil 527 personas. Únicamente había sobrepoblación de 7.8% en Apodaca, problema que ya no existe por la construcción de nuevos espacios.
Puntualizó que en los cinco centros penitenciarios se detectó falta de uniformidad en el registro de enfermedades o infecciones.