Zacatecas.- Este viernes se cumplen tres meses que ocurrió el feminicidio de Heidy Noriega Torres, de 31 años de edad, pero a la fecha su agresor sigue prófugo de la justicia, pese a que “se supone está plenamente identificado”, reclaman familiares de la víctima.
Argumentan que existen evidencias de que fue su expareja quien la golpeó brutalmente dejando su cuerpo inerte, junto a su pequeño hijo de un año, quien lloró incesantemente por toda una noche hasta que la mejor amiga de Heidy descubrió el cadáver.
Griselda, una de las hermanas de Heidy Noriega, incuso subió una petición para recabar firmas en la plataforma change.org para exigir que este feminicidio no quede impune, que no sea una cifra más y se haga justicia por este asesinato que dejó en orfandad a tres niños de 10, 5 y un año de edad.
La mujer reprocha que no ve ninguna acción contundente ni interés en capturar al presunto feminicida pese a que está plenamente identificado, pues fue la última persona que estuvo con Heidy, aquella noche del 29 de abril.
Griselda acusa que la Fiscalía General de Justicia de Zacatecas ha minimizado este crimen, primero, porque no actuaron a tiempo y permitieron que el agresor escapara de ese pueblo, igual que sus familiares. Además, a la fecha, no han emitido ninguna ficha de búsqueda para que pueda ser reconocido y se logre su captura.
La familia reprocha que las autoridades no le den importancia a las pesquisas del agresor y hagan justicia, incluso, cuestionan que mejor se protejan los derechos del feminicida, ya que les han llegado a decir que no publiquen en las redes sociales la foto del agresor, “porque eso vulnera sus derechos y afecta la investigación”.
Sin embargo, al ver que pasan los días y no hay resultados y ya ni siquiera les dan información de los avances, han recurrido a exigir justicia por las diversas plataformas de ayuda para exigir justicia y que no quede en la impunidad.
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Maltrato y amenazas
La familia de Heidy asegura que “el horrendo crimen” que ocurrió en el municipio de Valparaíso, el agresor lo cometió frente del bebé de un año y de su propia hija de 5 años, ya que después de cometer el asesinato, éste se llevó a la niña para dejarla en la casa de su familia, pero no le importó dejar abandonado al bebé llorando, ya que el pequeño no es hijo de él.
Los familiares mencionan que cuando Heidy fue pareja de Rubén “N” sufrió maltrato y constantes amenazas, por eso ella lo dejó y se fue a vivir al Estado de México, donde estudió belleza para sacar adelante a sus hijos.
Sin embargo, al tratar de rehacer su vida, se juntó con una persona con quien procreó al bebé, quien al tiempo también la comenzó a maltratar, incluso la corrió de su casa con sus dos hijos, situación que la obligó nuevamente a regresar a Valparaíso.
Tenía más de un mes que había retornado al pueblo y llegó a la vivienda de su madre, quien tuvo que viajar a Estados Unidos por un asunto familiar, por ello, Heidy estaba sola en la casa, por tal motivo, creen que su expareja aprovechó para acercarse a ella con el pretexto de ver a su hija y quizá ella lo permitió, “porque jamás se imaginó que al hacerlo, su vida corría peligro”.
A la familia de Heidy la invade el dolor y la burocracia, ya que sólo se logró la custodia de la niña de 5 años (hija del agresor), pero la custodia del bebé se la otorgaron al padre que vive en el Estado de México y temen que sea maltratado, debido a los antecedentes que orillaron a Heidy a que también huyera de aquel lugar por violencia intrafamiliar.
Cambio de estrategia
El asesinato de Heidy se convirtió en el sexto feminicidio ocurrido en lo que va del año. Recientemente en su último informe, María de la Luz Domínguez Campos, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Zacatecas (CDHEZ), urgió a las autoridades a crear políticas públicas en atención a hijas e hijos que quedan en orfandad por los feminicidios en la entidad.
“Estamos observando que incrementan este tipo de delitos y que tenemos cada día más víctimas directas, que son las mujeres asesinadas, pero también hay muchas indirectas, que en este caso son los hijos e hijas y que ellos deben de ser atendidos por las autoridades, pero muchas veces se quedan en el olvido”.
Urgió a modificar las estrategias para atender los feminicidios y cualquier tipo de violencia contra las mujeres, “porque se evidencia que las que se están implementando no tienen los resultados eficientes para prevenir este tipo de muertes”, además de la importancia de generar este registro de los infantes que quedan en desamparo para que sean atendidos
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