Cancún.- Ciudadanos que residen en Cancún protestaron hoy frente al consulado de Cuba en solidaridad con su pueblo, que protagoniza desde ayer la mayor alzada en contra del régimen impuesto por Fidel Castro desde hace 60 años, en demanda de la renuncia del actual presidente Miguel Díaz-Canel .
Las protestas se desarrollan en las 16 provincias de la isla y nacieron del hartazgo ante la crisis detonada por la carencia de productos básicos y de medicamentos, por el mal manejo de la pandemia por Coronavirus por parte del gobierno y las violaciones a los derechos humanos cometidas por el régimen en agravio de 11 millones de cubanos.
Entre las y los manifestantes hubo expresiones de preocupación y lágrimas ante la represión y ante “la masacre” que -temen- sobrevendrá para someter al pueblo que se ha sublevado.
“Lo que se viene es una masacre”, decía uno; “tememos un genocidio”, decía otra; “ellos (el gobierno) no va a soltar el poder y el pueblo se encuentra desarmado”, añadió uno más.
La situación, explicaron varias personas entrevistadas, ha motivado protestas en diversas ciudades del mundo para decirle al pueblo cubano que no están solos y “darles fuerza”.
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Aquí, donde radican un promedio de cinco mil cubanos, se pronunciaron por una Cuba en libertad, bajo el lema Patria y Vida, reclamando justicia, elecciones libres, respeto a los derechos humanos y libertad de prensa.
“Cuba se acaba de levantar desde ayer, la población completa del país, están cansados de tanta represión, de 62 años de dictadura y ya llegó el momento. Esperamos que sea definitivo. Ya hay noticias de que Díaz-Canel quiere tirar al Ejército a reprimir al pueblo.
“Ya eso es una guerra civil, el pueblo está completamente desarmado, no tiene nada, solo piedras y lo que pueda. Aquí estamos apoyando a los hermanos de Cuba y haciendo lo que se puede”, expresó Ohiaria C. T., quien lleva una década fuera de la isla.
La manifestación pacífica inició la tarde de hoy, frente al consulado de Cuba, a donde llegó una caravana de vehículos, de los cuales descendieron ciudadanas y ciudadanos de aquel país, quienes salieron huyendo de la dictadura impuesta por Castro, a partir de 1959, con el llamado “triunfo de la Revolución”.
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Para poner en contexto, José A.C. explica que, para el 16 de abril de 1961, Fidel Castro declaró el socialismo en la isla, lo cual marcó una época de aparente prosperidad para el pueblo cubano, no por su sistema político, ni económico, sino por el respaldo y financiamiento de la Unión Soviética.
Sin embargo, con la caída del “muro socialista” ruso, en 1992, el apoyo a la isla se acabó e inició un periodo de pobreza, carencias y rezagos.
José es licenciado en Derecho, profesor universitario con una Maestría en Criminología y una carrera técnica en Economía.
En Cuba, fue abogado de un bufete de abogados opositor al régimen castrista, lo que provocó que fuera encarcelado en una de las 215 prisiones que posee la isla, durante tres años.
Luego, logró escapar, llegando primero a Panamá y después a la frontera mexicana para cruzar por Tapachula, Chiapas, con dirección a Cancún, en donde desde hace dos años labora como guardia de seguridad. Aquí se encuentra en calidad de refugiado y cuenta con la residencia permanente.
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A pregunta expresa, aclara que el embargo declarado por Estados Unidos a la isla, no es la razón de su crisis y explica que es la versión que la dictadura de Castro vendió al pueblo cubano y al mundo, para justificar el fracaso y abuso de su régimen, que inició hace 60 años prometiendo ayudar a los pobres, sacarlos de la marginación y un caudal de propuestas que solo fueron engaños.
“Fidel quiso tanto a los pobres, que empobreció a Cuba. La hundió. La crisis que vive el pueblo cubano no tiene que ver con el embargo de Estados Unidos, que no es un bloqueo. Lo que pasa es que hay una ‘política fidelista’ que dicta que Cuba no negocia con el imperialismo. Esa es la razón.
“En Cuba no hay libertades. No puedes tener un negocio propio. La prensa es del gobierno, el sistema de salud es del gobierno, la educación es del gobierno, los servicios son del gobierno; todo es controlado por el gobierno que ha empobrecido al pueblo para tenerlo controlado. Afuera se dicen muchas cosas, pero yo les digo a esas personas que hay que ir a Cuba y vivirlo y sufrirlo para opinar sobre la dictadura”, expuso.
En el mismo sentido, Ohiari dice que en Cuba “no existe el bloqueo”, ya que es posible comprar directamente a Estados Unidos alimentos, medicinas e implementos sanitarios y de aseo.
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“Lo que Cuba no tiene es dinero para pagar, porque su economía es muy mala, basada en los 60 años de socialismo, de comunismo, de las grandes mentiras de los gobernantes en estos 60 años. El país se ha deteriorado totalmente, hay una muy mala administración y el pueblo ya se cansó y dijo ‘hasta aquí’. Ayer comenzaron a manifestarse, pero la policía está reprimiendo.
“Ya hay lesionados, desaparecidos, muertos. Cortaron el internet en toda la isla. No tienen luz y esperan en las noches para entrar a las casas buscando a la gente que salió a manifestarse para llevarla”, subrayó.
Para Ohiari, después de lo ocurrido “no hay marcha atrás” y se requiere de la intervención de la isla; para José, el 11 de julio y los días subsecuentes pasarán a la historia como momentos clave para la isla, pero “no es el final del régimen”.
afcl