Ante la pandemia por y pese a vivir al día, Carolina Ramírez , una cocinera de 36 años, regala comida a personas de la tercera edad y desempleadas en Rosarito, Baja California .

“Hace un año mi esposo tuvo un accidente y quedó paralizado de su cuerpo, a raíz de esa situación me tuve que salir de trabajar para poder cuidarlo. Sin embargo, la gente de la comunidad me comenzó a ayudar trayéndome despensa para subsistir y ropa para que yo pudiera vender en el mercado, pero debido a la contingencia sanitaria me vi obligada a dejar de hacerlo, así que ahora brindo comida a la comunidad de manera gratuita, porque hay personas que lo necesitan”, comentó Carolina, en una entrevista telefónica con EL UNIVERSAL.

Carolina explicó que inició regalando tortillas, pero ahora puede ofrecer más alimentos debido a que las personas de la comunidad le han donado despensa. “Recibo apoyo de la gente; me traen frijol, arroz, aceite, huevos, entre otras cosas porque saben de mi situación y así yo puedo devolver el favor regalando un 'taquito' del guisado que esté disponible”, contó.

Asimismo, la cocinera indicó que vende tortillas y sopes a través de Facebook, que es lo que le ha ayudado a poder vivir al día. “Mediante mi cuenta de Facebook me he dado la oportunidad de vender tortillas y sopes. El kilo de tortillas está a 35 pesos y el de sopes a 30 pesos, pero también vendo salsa en molcajete”, dijo.

Cocinera regala comida a personas afectadas por Covid-19 en Rosarito, BC
Cocinera regala comida a personas afectadas por Covid-19 en Rosarito, BC

Entre los platillos que Carolina ofrece se encuentran los tlacoyos, sopes, gorditas de manteca con frijol; aparte de varios guisados hechos a leña. “Al principio solamente venían 5 personas al día; ahora vienen aproximadamente 30 personas y se van agradecidos por el noble gesto”, detalló.

“Llevo un mes guisando para la comunidad y lo hago desde un cuarto de mi casa”, agregó.

El puesto que instaló Carolina se encuentra en la calle Úrsulo Galván número 20, en la colonia Ejido Mazatlán, y la pueden encontrar de lunes a domingo, de 10:00 horas a 18:00 horas.

“Agradezco a la gente de Rosarito, porque cuando yo necesité la ayuda, ellos no me negaban nada, y ahora es como estoy regresando el favor”, expresó.

“Las puertas seguirán abiertas hasta que Dios me lo permita”, concluyó.

afcl

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