Nos dicen que, sin duda, la Convención Bancaria en Acapulco en su edición número 85 fue muy especial y será difícil de olvidar. Nos cuentan que, además del “madruguete” del presidente Andrés Manuel López Obrador al Banco de México, hecho que les aguó la fiesta a los banqueros encabezados por Daniel Becker, hubo otro incidente en el que se vio involucrada la prensa. Nos reportan que varios representantes de los medios de comunicación que fueron a Acapulco a cubrir el evento sufrieron una intoxicación por alimentos. Se sospecha que pudo haberse tratado de la comida que se ofreció en la sala de prensa, pero también podría haber sido en el hotel en que se hospedaron. Luego de presentar algunos síntomas, y tras haber acudido al consultorio médico, afortunadamente pudieron seguir realizando sus labores.
Cero en comunicación
Hablando del “madruguete” de AMLO al Banco de México (Banxico), que tiene como gobernadora a Victoria Rodríguez Ceja, nos comentan que sacó lo bueno de la Junta de Gobierno. Nos cuentan que, a falta de una buena estrategia de comunicación y manejo de crisis, los subgobernadores dieron la cara ante esta prueba de ácido del banco central para defender la autonomía. Así, nos dicen que Irene Espinosa, Gerardo Esquivel y Galia Borja se sacaron un 10 al tomar la iniciativa de hablar con medios de comunicación y analistas presentes en la Convención Bancaria. No aplicaron la política del avestruz ni buscaron entrevistas a modo, como lo dicta el viejo manual de comunicación social para el control de daños. Ellos solos hicieron la chamba de otras instancias que, de plano, se vieron rebasadas.
Botanas, de capa caída
Si bien la evolución de la pandemia parece más positiva por los avances en la vacunación, el gasto de los consumidores en snacks y bebidas fuera del hogar aún no alcanza los niveles previos al Covid-19. De acuerdo con Kantar México, el consumo en cafeterías, bares o restaurantes a escala global aún está 10% abajo de lo que se registraba en el cuarto trimestre de 2019, antes de que llegara el coronavirus. Y si bien el consumo de refrescos, botanas y cervezas ha aumentado en valor por el alza de precios, aún no llega a los volúmenes prepandemia. Según la consultora, en el segundo semestre del año pasado se notó una ligera recuperación del consumo de este tipo de productos en México, pero la variante hizo que los consumidores regresaran a sus hogares, trasladando el consumo nuevamente a su casa.