Más Información
Se han registrado más de 9 mil jóvenes para participar en elección judicial: Sheinbaum; "aquí no se raja nadie", dice
Ataque a DBar en Tabasco tenía como objetivo un cliente, informa Fiscalía; confirman 6 muertos y 10 heridos
Secuestran a participante de MasterChef y a un hombre en la México-Cuernavaca; detienen a uno tras rescate
“No somos menos, somos iguales”; Claudia Sheinbaum reconoce que agresiones a mujeres son por discriminación
Pachuca.— A un mes de que le dejaran de suministrar el medicamento tocilizumab para la artritis idiopática que sufre su hija, Ofelia Martínez Morales, originaria de la sierra hidalguense, interpuso un amparo ante el Juzgado Cuarto de Distrito en Pachuca contra el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) para exigir que continúe el suministro del tratamiento.
Este amparo es el primero en Hidalgo y el octavo a nivel nacional dentro de la campaña “Yo te defiendo”, que busca que el gobierno federal cumpla con la entrega de medicamentos para pacientes enfermos en todos los hospitales.
Ofelia, de 35 años, dijo que es originaria de la comunidad de El Naranjo, ubicada en el municipio de La Misión.
Explicó que a su hija, Yuliana Itzel Lozano Martínez, quien cumplió 18 años, le retiraron el medicamento en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición, al igual que a otros 14 niños.
“No se vale que les quiten el medicamento, son niños”, dijo, y refirió que, en su caso, el medicamento tiene un costo superior a los 14 mil pesos y requiere de dos frascos al mes, por lo que no tiene la posibilidad de adquirirlo.
Indicó que son una familia pobre de la sierra y quienes han tenido que realizar diversos sacrificios para poder curar a Yuliana, ya que tienen que acudir a la Ciudad de México a sus consultas y en ocasiones deben quedarse hasta una semana.
Relató que su hija comenzó a presentar síntomas del padecimiento a los ocho años: “de pronto un día me dijo que le dolían a los huesos y empezó con mucha fiebre”.
Señala que al inicio acudió con varios médicos en Hidalgo hasta que le dieron el diagnóstico y fue transferida al hospital infantil.
Por la enfermedad, su hija no puede caminar, ha sufrido dos paros cardíacos y varias fracturas, por lo que debe tomar el medicamento de por vida.
De acuerdo con Ofelia Martínez, el problema es que al cumplir Yuliana los 18 años el hospital ya no quiere continuar con su tratamiento, por lo que espera la respuesta al amparo.