Cuernavaca.- Colectivos de la comunidad de la diversidad sexual protestaron por la designación de Roberto Yáñez Moreno como diputado local , porque ocupó un espacio que corresponde a la comunidad lésbico-gay , conforme a la reforma electoral.
César Guerra Nava, organizador del festival cultural de diversidad y género “Diversidad somos”, afirmó que la toma de protesta de Roberto Yáñez fue una burla y una violación a los derechos humanos de este sector de la población, porque es de dominio público que el ahora diputado lleva una vida heterosexual, está casado y tiene tres hijos, y jamás se ha aliado a la diversidad sexual.
A decir de los integrantes de la comunidad lésbico-gay, Roberto Yáñez incurrió en una falacia, debido a que en varias ocasiones ha mencionado que se registró como parte de la comunidad LGBTTTIQ+ .
En este sentido anunciaron la promoción de recursos legales con base en la jurisprudencia respecto a elecciones en materia de minorías.
“Es deleznable que una persona se autodescriba y se asuma como algo que no es, esto es violentar el derecho humano. Hay una indignación de tomarse una atribución y usurpar, por eso el Congreso tendrá que dar cuenta de ello por la forma en cómo se generó este proceso”, dijo César Guerra.
Afirmó que hasta este momento Roberto Yáñez no tiene su constancia por parte del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (Impepac).
El viernes pasado el pleno del Congreso del estado avaló por unanimidad llamar a rendir protesta del cargo a Roberto Carlos Yáñez Moreno, como diputado en sustitución de su tío Juan José Yáñez Vázquez, fallecido hace 26 días.
Su designación desató protestas de la bancada de Morena quien acusó a los diputados del PAN, PRI, Nueva Alianza y Movimiento Ciudadano de activar una sesión con solo 10 diputadas presentes en el salón de plenos, mientras que el presidente de la Mesa Directiva, Francisco Sánchez, declaró quorum legal para iniciar la sesión.
Según Paola Cruz, líder de Morena en el Congreso local, esa acción contravino la ley que requiere el 50% más uno de los integrantes de la legislatura, en este caso debieron ser 11 diputados y diputadas presentes, considerando que en ese momento sumaban 19 legisladores ante el fallecimiento de uno de sus compañeros, para que los acuerdos tomados fueran válidos.
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