El incendio que permanece activo en el norte del país no pudo ser combatido en Nuevo León por los fuertes vientos, mientras que Coahuila presentó avances en el control del siniestro y autoridades señalaron ya tener a los responsables de iniciar el fuego.
Protección Civil de Nuevo León señaló que no fue posible realizar labores de combate ni por tierra ni por aire por seguridad del personal, debido a ráfagas de viento de más de 90 kilómetros por hora registradas en el municipio de Santiago.
Al mismo tiempo, puntualizó Protección Civil del Estado, “las aeronaves que realizan operaciones con ataque tienen que permanecer aterrizadas por seguridad en la helibase ubicada en Laguna de Sánchez”.
Asimismo, por anoche señaló la dependencia que unos 80 pobladores de la comunidad de San Isidro en la sierra de Santiago fueron evacuados hacia un sitio seguro, ante el riesgo que representa el exceso de humo por el avance de las llamas.
En la parte de Coahuila, la Secretaría del Medio Ambiente refirió que en Arteaga tienen un avance de 55% en el control del fuego y 30% de liquidación, con una zona aproximada de 3 mil hectáreas afectadas.
Además, fuentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) confirmaron que fueron turistas, originarios de Nuevo León, quienes causaron el incendio.
Combatieron además cuatro helicópteros y 433 brigadistas.
Mientras que en la conflagración registrada en la Sierra de Zapalinamé se tenía hasta ayer 70% de control y 60% de liquidación, con una superficie afectada de 366 hectáreas.