Estados

Clandestinidad y estragos en la nueva normalidad

Ante medidas para frenar Covid, personas se las arreglan para subir al transporte

Calles de Guadalajara lucieron vacías este fin de semana. CARLOS ZEPEDA. EL UNIVERSAL
02/11/2020 |02:37Raúl Torres / Corresponsal |
Redacción El Universal
Pendiente este autorVer perfil

Guadalajara.— Las puertas y ventanas del café cotidiano están cerradas, pero dentro se escucha una música tenue. En la calle, una mujer golpea la puerta como queriendo no hacer ruido, otra abre: “Vengo por un expresso doble”, dice la que está afuera mientras entrega un pequeño termo y se retira de la entrada a una distancia prudente. Hay algo de clandestinidad en la escena, pues según las medidas implementadas por el gobierno de Jalisco, al activar el llamado “Botón de emergencia” para contener los contagios de Covid-19, está prohibido consumir y recoger alimentos o bebidas en cafeterías y restaurantes, que sólo pueden hacer envíos a domicilio.

En otros sitios, los clientes se diluyen entre los repartidores de comida, que hacen filas en las puertas de los restaurantes.

Las calles de Guadalajara lucen prácticamente vacías durante el primer fin de semana del paro parcial, que se extenderá hasta el próximo 13 de noviembre; sólo algunas personas caminan.

Newsletter
Recibe en tu correo las noticias más destacadas para viajar, trabajar y vivir en EU

Con las medidas implementadas el viernes a partir de las 19:00 horas, el gobierno de Jalisco pretende reducir la movilidad de los ciudadanos hasta llegar a 40%, pero el primer ensayo de restricción de horarios del transporte público colapsó varios puntos de la ciudad, pues camiones y trenes dejaron de brindar servicio a las 21:00 horas, dejando a cientos varados y propiciando el abuso de los taxis comunes, los únicos autorizados para trabajar a diario las 24 horas.

Según el análisis de las autoridades, el colapso se debió a que quienes suelen trasladarse en 4 horas y media —entre 17:30 horas y 22:00 horas— intentaron hacer el recorrido en sólo dos horas, entre las 17:30 y 19:30, lo que propició una saturación con 20% más de la demanda habitual.

La solución que se propone —el escalonamiento de horarios para salir del trabajo— se probó y falló durante el primer encierro hace siete meses, pues los empresarios no cumplieron su parte.

Hoy se pretende que los empleados de gobierno terminen su jornada a las 16:00 horas; los servicios y oficinas corporativas a las 17:00; la construcción, entre las 17:00 y 18:00 horas; el comercio, entre las 17:00 y 19:00, y la industria después de las 20:00 horas.

Este domingo el índice de contagios llegó a 416 personas por cada millón; el gobernador, Enrique Alfaro, justificó las medidas implementadas para restringir las actividades nocturnas y durante los fines de semana.

Mientras, algunos buscan cómo burlar las restricciones: en el Mercado de las Flores, en Guadalajara, el cempasúchil aguarda oculto dentro de los locales cerrados, pero sólo hay que arrimarse un poco para que algún vendedor se acerque a ofrecerlo.

Te recomendamos