Las integrantes del Colectivo Solecito se despidieron con una misa de la mega fosa clandestina de Colinas de Santa Fe en el puerto de Veracruz.
Los trabajos de búsqueda de cuerpos concluyeron con el hallazgo de 298 cráneos y 22 mil 900 restos óseos en poco más de 135 áreas.
Madres y padres de familia dijeron adiós al predio que mediante un anónimo localizaron en el 2016 y que a la postre se convirtió en la fosa clandestina más grande de Latinoamérica.
"Estamos satisfechas porque algunas madres de nuestro colectivo y de otros colectivos tuvieron paz de saber en dónde estaban sus hijos, cosa de nosotros no tenemos”, dijo la integrante del colectivo, Rosalía Castro Toss.
La activista, aseguró que la dimensión de la fosa permitió visibilizar la crisis humanitaria que enfrenta el estado por los desaparecidos.
Sin embargo, expuso que ahora viene el trabajo de identificación de restos, pues las autoridades solamente han logrado identificar a 22.
La fundadora de la organización, Lucía de los Ángeles Díaz Genao, dijo que ahora el problema es la identificación de los restos , pues sólo cuentan con dos mil perfiles genéticos.
“Nuestro problema sigue siendo la falta de perfiles genéticos de las familias para poderlos cotejar con los hallazgos", dijo.
En los últimos ocho años suman de manera oficial al menos 601 fosas clandestinas en territorio veracruzano, con 518 cuerpos, 560 cráneos y 53 mil 606 fragmentos de cuerpos de personas, entre hombres, mujeres y niños.
jrc