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Autoridades de Chalchihuitán se manifestaron en contra de la sentencia del Tribunal Unitario Agrario (TUA) que dejó sin efecto una resolución presidencial de 1976 en la que se establecen los límites territoriales entre Chenalhó y este municipio, pues aseguraron que no fue apegada a derecho y anunciaron que llevarán el caso a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Abundó que “sólo se declara sin efectos jurídicos y, por lo tanto, nula, el acta de conformidad de linderos del 6 de agosto de 1976, suscrito por comisariados de los bienes comunales de San Pablo Chalchihuitán y San Pedro Chenalhó”.
“Lo que está ordenando el Tribunal es que se tiene que hacer de nueva cuenta la diligencia del deslinde de tierra entre ambos municipios, eso significa que a nadie favorece la sentencia, jurídicamente no garantiza el triunfo de nadie”, explicó.
Sentencia tenía un mes. Autoridades de Chalchihuitán responsabilizaron al gobierno de Manuel Velasco Coello y al Tribunal Unitario Agrario del desplazamiento de más de 5 mil indígenas tzotziles y el deceso de nueve de ellos debido a que la sentencia fue emitida desde el 6 de noviembre y no se dio a conocer hasta un día antes de que los magistrados salieran de vacaciones.
“Se debió evitar el desplazamiento forzado interno de los indígenas que aún continúan viviendo en el monte enfermos y soportando temperaturas de hasta cuatro grados y sin alimento, así como el bloqueo carretero, los ataques con armas de fuego, las amenazas y el terror”, recriminó el vocero de los comuneros de Chalchihuitán, Nicodemo Aguilar.
Abundó que hay una clara violación a los derechos humanos en contra de los desplazados, que en su mayoría son mujeres, niños y adultos mayores, ya que el Tribunal debió ser independiente y no acatarse a los caprichos del gobierno del estado.
En el primer campamento de Pom, los hombres, mujeres y ancianos indicaron que continuarán viviendo bajo los árboles, porque creen que la resolución del TUA es “una mentira del gobierno”.
Ausencio Pérez Paciencia, uno de los desplazados, afirmó que “las tierras de Chalchihuitán no se venden y no las dejarán, ni aun con el veredicto del TUA”.
“Nosotros de forma pacífica vamos a tratar de recuperar lo que es nuestro, porque es de nosotros”, insistió el hombre, quien acusó a la alcaldesa de Chenalhó, Rosa Pérez Pérez, de “engañar a su pueblo al decirle que ya ganó, pero nosotros tenemos los planos de esas tierras, de la resolución presidencial que nos acredita como legítimos propietarios de las 365 hectáreas”.