Guadalajara.— En Temacapulín, uno de los tres pueblos que se inundarían si continúa el proyecto de la presa El Zapotillo, están de fiesta porque tras reunirse la noche del lunes con el presidente Andrés Manuel López Obrador, éste aseguró que no habrá recursos para continuar la obra, al menos hasta 2021.
Así, mientras los gobernadores de Jalisco, Enrique Alfaro, y de Guanajuato, Diego Rodríguez, celebraron que el Presidente descartara la posibilidad de derribar la cortina que ya llega a 80 metros de altura sobre el lecho del río Verde, en el municipio de Cañadas de Obregón, Jalisco, los pobladores afectados por el proyecto aseguran que eso no significa que la obra continúe.
El lunes, el titular del Ejecutivo federal recibió a los mandatarios, quienes durante dos horas defendieron el proyecto para abastecer de agua a Guadalajara, León y Los Altos de Jalisco; más tarde, López Obrador atendió a pobladores de la zona y escuchó por qué se oponían.
Al salir de la reunión el sacerdote Gabriel Espinoza, habitante de Temacapulín y uno de los impulsores de la resistencia, explicó: “Estamos muy contentos porque el Presidente nos ha instruido para que sigamos trabajando en la ruta de la gestión integral del agua, nos dijo que no habrá más presupuesto para la presa El Zapotillo, dado que ha pedido a los gobernadores de Guanajuato y Jalisco que se sienten a trabajar alternativas con los pueblos, los productores y la ciudadanía”.
Precisó que López Obrador dijo que en dos o tres meses, ambas partes tendrán que llegar con una propuesta conjunta para decidir el futuro de la obra, ya que de lo contrario se tomarán otras medidas.
Los habitantes de Temacapulín, Acasico y Palmarejo que acudieron a Palacio Nacional consideraron extraño que los gobernadores celebraran la no demolición de la cortina, pues aunque ha sido una exigencia, se sabía que esta reunión con López Obrador era un primer acercamiento y ese punto no se discutiría.
María González, del Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario (IMDEC), organización que ha acompañado la lucha contra la presa, indicó que otro aspecto importante de la reunión fue que el gobierno federal no avaló el acuerdo de entendimiento que hace un mes firmaron los gobernadores de Jalisco y Guanajuato para la distribución del agua del embalse, lo que confirma que la obra seguirá detenida.