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A diferencia de días anteriores, este jueves, miles de personas abarrotaron los diferentes cementerios de Mérida e incluso en muchos casos la novedad fue la presencia de mariachis y trovadores que la gente decidió llevar ante la tumba de sus seres queridos en el día dedicado a los fieles difuntos.
Tal como se pronosticó, miles de yucatecos abarrotaron el Cementerio Xoclán, ubicado en el poniente de Mérida, y en donde se supone que está el mayor número de sepulcros.
De acuerdo a elementos de la Policía Estatal Coordinada y de la Policía Municipal, desde temprana hora comenzaron a llegar familias para dar mantenimiento a las criptas de este panteón y para participar en la misa que ofreció el arzobispo de Yucatán, Gustavo Rodríguez Vega.
Solamente en la misa que ofreció el arzobispo yucateco se estimó que participaron 4 mil personas y fue alrededor de las 11 de la mañana. Los panteones estarían abiertos hoy hasta alrededor de las 6 de la tarde.
También los comerciantes de flores, velas y comida reportaron el alza en sus ventas, aunque recalcaron que en los días previos no hubo gran movimiento ni en el Xoclán, ni en el Cementerio General y los otros 3 cementerios más pequeños que hay en Mérida.
En la mayor parte de las empresas y oficinas de gobierno no se laboró por lo que eso contribuyó a una mayor afluencia en los camposantos.
A diferencia de otras ocasiones, este año varias familias llevaron música a sus fieles difuntos, trovadores yucatecos y música de mariachis.
Aunque unos acudieron de visita y para llevar flores, veladoras y música, otros más dedicaron parte de su estadía para limpiar las tumbas y pintarlas.
Por su parte, el arzobispo de Yucatán, Gustavo Rodríguez Vega, hizo un llamado a preservar nuestras tradiciones en vez de dedicarle tiempo a celebraciones “que no tienen nada de cristiano”, como el Halloween.
Como cada año, se celebró la misa a las 11 horas, y desde momentos antes los feligreses llegaron al panteón con flores y velas.
El arzobispo recalcó que aunque en estos días hay celebraciones “que no tienen nada de cristiano”, como el Halloween o las alabanzas a la Santa Muerte, “las costumbres en parte mayas y en parte españolas como el Hanal Pixán sí tienen mucho que ver con el cristianismo”.
“En el Hanal Pixán se celebra con alegría a los difuntos como seres que viven, seres espirituales: sus cuerpos están sepultados y su espíritu vive”, ejemplificó.
Asimismo, señaló que las tradiciones mayas “que perviven en nosotros nos acercan a nuestra fe”.
También pidió creer y apoyar la hermandad, la unión y la solidaridad con el prójimo, ya que de esta manera “nos aseguramos que después de la muerte tengamos acceso a la Gloria Eterna del Señor”.
afcl
