Monterrey.— En una diligencia relacionada con el caso del feminicidio de Debanhi Escobar, la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) realizó un cateo en el domicilio de una empleada del motel Nueva Castilla y decomisó varias memorias de almacenamiento USB, presuntamente del establecimiento.
La trabajadora del motel por el momento no fue detenida, pero sí es investigada por los delitos de encubrimiento y falsedad de declaraciones a una autoridad, informó la dependencia.
La fiscalía indicó que el operativo se llevó a cabo el 19 de agosto, en vísperas de que el caso sea atraído por la Fiscalía General de la República (FGR), a petición de los padres de la joven estudiante, quien desapareció el 9 de abril y fue localizada en una cisterna del citado motel el día 21 del mismo mes.
La diligencia fue realizada en un domicilio de la colonia Moisés Sáenz, en el municipio de Apodaca, al noreste de Monterrey, donde reside la presunta empleada del motel Nueva Castilla.
“En el sitio fueron asegurados diversos indicios que consisten en una memoria USB en color azul, un estuche de plástico, una memoria USB en color verde y dos memorias USB en color morado, además de ocho teléfonos celulares y una computadora Laptop de la marca ACER con su respectivo cargador”, detalló la dependencia.
Inicialmente, el personal encargado y dueños del motel Nueva Castilla aseguraron a las autoridades que no contaban con videos, ya que el equipo que tenían instalado era simplemente de monitoreo. Posteriormente, se reveló que sí había grabación de videos por las más de 15 cámaras del establecimiento.
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