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Monterrey.— El caso por el cual fue detenido el exgobernador Jaime Rodríguez Calderón El Bronco data de 2018, cuando dispuso de recursos humanos y materiales del gobierno del estado de Nuevo León para recolectar las firmas que requería para ser candidato independiente a la Presidencia de la República en las elecciones de ese año.
Aunque lo negaba públicamente, apenas consiguió la gubernatura, Rodríguez Calderón desplegó una intensa campaña de promoción por todo el país para ir armando una estructura con la que buscaría la candidatura presidencial independiente, que finalmente logró, no exenta de polémica.
Pese a que presentó más de 2 millones de firmas, el Instituto Nacional Electoral (INE) sólo le validó 835 mil 511 porque las restantes presentaron inconsistencias.
De acuerdo con las autoridades electorales, el excandidato presidencial independiente presentó 355 mil 707 apoyos irregulares; de ellos, 55.84% eran fotocopias, y 44.16%, simulaciones con uso de plantillas para fingir respaldo de los ciudadanos.
Este mecanismo consistió en fotografiar tarjetas de descuento, de puntos y de presentación, pero con la captura manual de datos de la Lista Nominal de Electores para tratar de engañar al instituto.
Con el fin de reunir las firmas necesarias, habría utilizado a 652 servidores públicos de 29 dependencias del gobierno de Nuevo León, quienes habrían hecho en horas y días hábiles lo que fue considerado una aportación en especie estimada en
2 millones 608 mil pesos.
