Zacatecas.— A través del territorio de Zacatecas atraviesan cinco carreteras federales que conectan al centro del país con la frontera norte, una ubicación estratégica que ha sido aprovechada por el crimen organizado no sólo al disputarse el territorio, sino también para el robo de vehículos.
Incluso, no se descarta que la carretera federal 54 pueda usarse como nueva ruta para el tráfico de migrantes, reconoce el fiscal Francisco Murillo Ruiseco.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el fiscal estatal explica que las carreteras federales 23, 44, 45, 49 y 54 abarcan más de 12 mil kilómetros. Durante 2022, en estos tramos ocurrieron 228 robos de vehículos, de los cuales 200 fueron con violencia y en 102 casos implicó la privación de la libertad de manera temporal de las personas que los conducían.
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El modus operandi es: “Un grupo armado intercepta a las víctimas, las amagan con armas largas, las privan momentáneamente de la libertad y luego las abandonan en los caminos”, señala Murillo Ruiseco.
La carretera 45, que va de la Ciudad de México hasta Ciudad Juárez, Chihuahua, fue la que registró una mayor incidencia delictiva en la entidad, con 71 robos.
En segundo lugar figura la 54, que conecta con Coahuila, donde se reportaron 56 casos de robos de vehículos.
Después está la 49, que vincula con Durango, con 58 casos; luego la carretera 23, con 20, y finalmente la 44, con 11 reportes.
En los primeros cuatros meses de este año, ya suman 78 casos en todo el estado y la carretera con mayor problemática es la 54, con 25 casos de robo de autos.
El fiscal puntualiza que el tramo de mayor riesgo se centra en los municipios de Villa de Cos y Concepción del Oro, que conecta con Saltillo y con San Luis Potosí, debido a que esta zona no tiene señal de telefonía celular: “Es un tramo largo de silencio que permite a las organizaciones criminales tener ventajas”.
Las investigaciones revelan que las camionetas pick up y el color blanco son los que más roba el crimen, ya que el año pasado fueron 101 unidades blancas, 35 grises y 25 negras. Hubo 58 eventos, durante los cuales se robaron 127 camionetas debido a que en varios hechos el objetivo fueron tráileres nodriza que transportaban vehículos nuevos.
Ruta de migrantes
En la carretera 54, el 23 de abril un grupo armado asesinó a dos personas de origen colombiano y dejó a otras cuatro lesionadas (entre ellas dos menores de edad). El fiscal refiere que se trató de un caso coyuntural, ya que las primeras investigaciones arrojan que “la condición de las víctimas es de turistas”, quienes viajaban por brechas en una camioneta y fueron rafagueadas cuando intentaron huir al ser interceptadas por el crimen.
Murillo Ruiseco explica que el caso fue notificado a la embajada, “no para entregarlos, ya que su estancia es legal, sino para la asistencia consular a la que tienen derecho los extranjeros”.
Incluso, debido a que sufrieron un delito, la situación de los heridos puede cambiar de turistas a víctimas y recibir protección del Estado mexicano, señala.
No se descarta que ese tramo de la carretera federal 54 pudieran convertirse en una nueva ruta para el tráfico de migrantes, ya que hay una arteria que conecta con Matehuala, San Luis Potosí, al señalar que esta conducta compete investigar a la autoridad federal, pero dicho fenómeno se ha planteado en la estrategia de coordinación estatal para reforzar esa zona.
Además, dice, se tiene el antecedente de que hace dos años, en ese tramo, circulaban cinco vehículos de transporte de personal procedente de Aguascalientes, donde trasladaban a migrantes, pero al evadir los puntos de revisión se internaron por brechas y fueron interceptados por el crimen.
Al paso de los días aparecieron los choferes y declararon que fueron privados de la libertad y desconocían el paradero de las demás víctimas, caso que se notificó a la autoridad federal para atender e inhibir ese nuevo riesgo.
Mientras que en las carreteras colindantes con Jalisco la problemática se centra en la disputa territorial entre grupos criminales.
Problemática nacional
El fiscal revela que el robo de vehículos en todas sus modalidades a nivel nacional “va al alza y es una realidad preocupante”, porque las organizaciones criminales ahora también hurtan vehículos de alta gama que han aparecido en Europa del este, situación que se abordó recientemente en reunión de la Conferencia Nacional de Procuración de Justicia.
Acorde con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en 2022 se abrieron 138 mil 41 carpetas de investigación por robo de vehículos, de los cuales 60 mil (43%) estaban asegurados. Al menos en Zacatecas, el año pasado se reportaron mil 598 robos en general y se recuperaron 927 unidades.
Ante este escenario nacional, se planteó una estrategia transversal en el país para la localización y recuperación de vehículos robados, pero admite que las fiscalías antes deben resolver muchas problemáticas para sincronizar bases de datos y crear procedimientos homologados.
Señalan abandono de prevención
La inseguridad en las carreteras federales del país a causa del crimen organizado, en gran parte, se debe “al abandono de las estrategias preventivas de atención al delito y a las víctimas, porque se perdió la proximidad ciudadana con la llegada de la Guardia Nacional, que tiene un carácter totalmente reactivo. Ellos buscan enemigos, no auxiliar a las personas que transitan por las carreteras”, asegura Rafael Cortés Medellín, analista en seguridad pública y función policial.
El experto afirma que antes la policía federal realizaba vigilancia constante en carreteras, con inteligencia que permitía “un mayor despliegue, disuasión y factor sorpresa”; en cambio, ahora los patrullajes de la Guardia Nacional son “tumultuosos de hasta siete elementos en un solo vehículo, van con la idea de enfrentar a un enemigo, pero sin resultados, porque alertan a la delincuencia con operativos estructurados, muy cuadrados que les permite alejarse y luego volver a apoderarse de las zonas”.
Señala que los elementos tienen un corte militar y “una formación que los limita a tener habilidades de comunicación y trato con la víctima”, a diferencia de la formación que tenía la Policía Federal, que tenía capacidad y conocimiento para “detener a un conciudadano por infringir una normatividad” y con facilidad podían fungir como primer respondiente, desde integrar un informe policial homologado hasta la preservación de la escena.
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“Se requiere actuar quirúrgicamente para obtener resultados (...) No puedes pedirle a un carnicero que de repente se vuelva cirujano”, concluye.
Postura oficial
Por su parte, las autoridades federales de seguridad en Zacatecas indicaron a EL UNIVERSAL que “sí hay acciones de prevención dentro de la estrategia implementada en las carreteras, ya que esta situación es una de las prioridades en la entidad”.
Informaron que se estableció contacto con las empresas automotrices para aplicar el operativo Carrusel, particularmente en la custodia del tránsito de vehículos nodriza, mientras transiten por las carreteras de la entidad, lo que ha permitido que desde el 19 de enero no se haya presentado un nuevo atraco. Aseguraron que en los últimos meses se reforzaron los tramos carreteros con incidencia delictiva, así como la vigilancia en unidades de revisión, pero refirieron que los criminales se desplazan por caminos rurales y brechas.