Juchitán.— El coordinador del Centro por la Dignificación Humana, Luis Rey García Villagrán, quien encabeza la caravana que salió de Tapachula, Chiapas, el pasado 24 de diciembre y que avanzó hasta Mapastepec, anunció que retomará su camino a Oaxaca.
El dirigente acusó que fueron “engañados por las autoridades migratorias”, por lo que se están reorganizando, pues hasta hoy [viernes] su contingente permanece disperso en distintos municipios.
“La intención es salir caminando el próximo lunes hacia Los Corazones, comunidad que pertenece al municipio oaxaqueño de San Pedro Tapanatepec”, señaló.
Añadió que las familias migrantes que fueron separadas con la promesa del Instituto Nacional de Migración (INM) se van a concentrar en la ciudad de Arriaga y se estima que el número de personas, que inicialmente era de 5 mil, aumente hasta 7 mil u 8 mil, pues más extranjeros se sumarán.
Migrantes que se quedaron varados en Juchitán, Oaxaca, mototaxistas y comerciantes bloquearon la circulación sobre la carretera Transístmica 185 para exigir al gobierno de Oaxaca la reapertura del Centro de Movilidad Migratoria, que desde la noche del jueves frenó los traslados de extranjeros en autobús a la Ciudad de México.
Además de esa protesta en el tramo Juchitán-La Ventosa, donde incendiaron llantas, los inconformes también cerraron el paso de vehículos sobre el Periférico Oriente, vialidad de Juchitán que da acceso a la terminal donde funcionó el centro de movilidad desde el 25 de septiembre del año pasado y que facilitó el traslado de más de 184 mil migrantes en tránsito, de acuerdo con datos oficiales.
El pasado 31 de diciembre, representantes de los gobiernos federal como estatal anunciaron el cierre de este centro con el argumento de que había cumplido su ciclo y su objetivo de facilitar el traslado de los extranjeros que buscan cruzar el país y llegar a la Unión Americana.