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Villahermosa.— A pesar del calor sofocante de 44 grados con una sensación térmica de 51, Miguel Díaz López, originario del estado de Chiapas, labora más de 10 horas en las calles de esta ciudad vendiendo pozol, una bebida tradicional de Tabasco.
Don Miguel, de 37 años, es uno de los cientos de vendedores ambulantes que no se pueden dar el lujo de quedarse en casa, tienen que salir día con día a ganarse unos pesos para poder mantener a su familia, sin importar que afuera esté ardiendo con tanto calor, que ha provocado incendios de pastizales y hasta explosiones de tanques de gas estacionarios.
El comerciante sale a vender pozol con “harto hielo” desde las 8:00 horas y a veces regresa a las 18:00 horas, hasta que acaba el último de los 80 litros que le preparan para todo el día.
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“Hay mucho calor para estar trabajando; nosotros salimos a las 8 de la mañana, pero no tenemos horario de regreso, hasta que venda todo. Tengo 40 kilos, entonces traemos 80 litros”, relata Miguel mientras sirve a uno de sus clientes.
Lo peor es que después de manejar su triciclo con el bote de pozol de 80 litros al llegar a su casa también sufre el calor porque no tiene aire acondicionado para refrescarse, por lo que no le queda más que recurrir a un viejo ventilador.
“Ahorita que hay mucho calor se cansa uno mucho. Terminamos a veces hasta las 6 de la tarde en mi bicicleta (triciclo); se me calientan los pies, se cansan mis pies, cuando llegó a la casa ya no salgo, hay mucho calor y dentro de mi casa también hay, porque no tenemos clima (aire acondicionado)”.
Se podría pensar que con estas altas temperaturas don Miguel vende más pozol, pero no es así, ya que como hay menos gente en la calle se le complica más la venta. “No hay mucha gente en la calle, no sé qué está pasando, quizá porque hay mucho calor. Además es que hay más competencia, está más tranquilo, Quizá le dé unas 15 a 20 vueltas al centro histórico, porque es la zona que me toca”, apuntó.
El vendedor de pozol maneja tres precios: vaso chico de 15 pesos, vaso mediano de 20 y el grande de 25. El pozol es una bebida tradicional de Tabasco que es elaborada a base de maíz y cacao, se sirve con mucho hielo. Las nuevas generaciones ya no lo toman natural que sabe un poco amargo, sino que optaron por ponerle azúcar y en algunos lados lo venden con horchata.
Don Miguel asegura que a veces descansa un poco en su larga jornada y lo hace “buscando una sombrita, algo para descansar”, pero es difícil encontrarla en una ciudad que ha privilegiado las construcciones y derribado los árboles.
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Incendios
El Instituto de Protección Civil del Estado de Tabasco informó que en lo que va del año, con corte al 7 de mayo, los centros regionales y la dirección de bomberos han atendido 658 incendios.
El IPCET precisó que hasta el 29 de abril de 2024 se tenían registrados 585 incendios; sin embargo, en los primeros días de mayo las atenciones han registrado un considerable incremento. Reportó que se llevan a cabo acciones en los basureros de Teapa, Huimanguillo y Paraíso, donde se tienen activos incendios.
En coordinación con la Comisión Nacional Forestal, también se atendió un incendio en la comunidad Tulija sección Chinal, Macuspana, el cual afectó 10 hectáreas de bosque.