Pachuca.- Tras las denuncias de acoso que se realizaron en el movimiento #MeToo , se requiere avanzar en la conformación de un protocolo de atención para acoso sexual y laboral al interior de las instituciones de gobierno y la creación de un observatorio para vigilar el cumplimiento de los Derechos de las mujeres, señaló la activista Ana Lara.
De acuerdo con la dirigente de la organización Colectiva de Mujeres contra la violencia , en Hidalgo se detectó un fuerte miedo de las mujeres para denunciar el acoso, en gran medida porque trabajan para gobierno ya sean ellas o sus parejas y existe temor a represalias, además de que hay baja autoestima, advirtió.
Hay un aplastante ejercicio de poder, falta de empatía con las víctimas y la defensa que tienen los agresores por otras mujeres cercanas a su entorno y que no vivieron experiencias de acoso con los denunciados.
Precisó que tras el #MeToo, se debe de continuar y parte de estos trabajos en Hidalgo, es crear un Observatorio para vigilar y promover el ejercicio y cumplimiento de los derechos , además de construir de manera conjunta con las dependencias los protocolos de atención contra el acoso, hostigamiento y violencia sexual y laboral.
La activista afirmó que se deben de establecer acciones hacia el interior de las dependencias para detener y visibilizar este tipo de delitos.
Además afirmó qué hay deficiencias en los conceptos que describen acoso, hostigamiento y aprovechamiento sexual ya que se llevan al terreno moral con el uso de términos como lascivia, capacidad de resistencia al acto y tocamiento libidinoso.
Así también indicó que hay un uso de estos para la defensa de los generadores de violencia, “por ejemplo, con el asunto de que si no opuso resistencia es que la mujer consintió tácitamente”.