Puebla.— El gobernador, Miguel Barbosa Huerta, aseguró que demandará a Emilio Lozoya por daño moral, ya que jamás dialogó —ni personalmente ni por vía telefónica— con él. Menos aún le solicito alguna gestión ni le pidió dinero al exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex).
“Estoy limpio. Siempre he actuado con honestidad y buena fe”, afirmó en su conferencia virtual, en respuesta a declaraciones de Emilio Lozoya, en las que lo señaló durante el proceso de la reforma energética.
El mandatario poblano dijo que esas afirmaciones “son totalmente falsas y nunca lo podrá probar. Lo reto a presentar una sola prueba, yo no apareceré en ninguna grabación, nunca hablé con [Emilio] Lozoya, jamás”.
Además, Barbosa Huerta expuso que la acusación sobre una gestión que supuestamente hizo para su hermano se trata de una mentira: “Ese hermano que tengo tiene más de 30 años de trabajar en plantas de todo el país, es ingeniero (…) él nunca ha estado en oficinas centrales”.
Sobre que presuntamente le solicitó dinero cuando era coordinador de los senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el gobernador poblano calificó el señalamiento “como una verdadera estupidez”.
Y precisó: “No habrá recibos ni video, ni grabaciones que lo demuestren. Estoy limpio”.
Además, recordó que su posición y la del grupo parlamentario que lideraba, en la reforma energética, fue en contra.
“Nos coordinamos alrededor del liderazgo del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas. Generamos un activismo enorme, tanto en diciembre, que fue la discusión de la reforma energética constitucional, como cuando se debatió en el pleno”, aseveró.
El gobernador reveló, además, que no acudió a ese debate histórico, porque su condición grave de salud se lo impidió.
“Estaba en el hospital, porque me amputaron la pierna derecha, durante la discusión, en agosto de 2014”.
Asimismo, el mandatario estatal recordó que durante la discusión de la reforma energética, durante el anterior gobierno federal, desarrollaron un intenso activismo parlamentario, tanto los senadores del PRD, como los del PT, quienes sostenían una posición en contra.
“Todos los demás estaban a favor. Estoy tranquilo, estoy limpio, desconozco las motivaciones que tuvieron por origen, para que aparezca yo ahí, fue una mala estrategia querer involucrar a alguien al que no le van a poder imputar nada”, subrayó.