Donde se comienzan a barajar más nombres, nos platican, es en la designación del nuevo fiscal general de Justicia de Nuevo León, ante un eventual veto del gobernador Samuel García (MC) a la propuesta del Congreso local del excandidato priista a gobernador Adrián de la Garza. Don Samuel dejó claro que se necesita un perfil más técnico y menos político, por lo que se considera a Federico García Scott, exdelegado de la Fiscalía General de la República (FGR) en Tamaulipas; otros se pronuncian por una mujer, aunque la propuesta es la fiscal especializada en feminicidios Griselda Núñez, pese al desaseo y mal manejo del caso Debanhi, por lo que algunos llaman a darle otra pensadita. ¡Ajúa!
En jaque por la narcocultura
El que anda “en el ojo del huracán” en Sinaloa, nos platican, es el titular de Cultura municipal de Culiacán, Carlos Alfonso Ramírez Reyes, cobijado “a capa y espada” por el alcalde Juan de Dios Gámez Mendívil (Morena). Nos relatan que don Alfonso tiene tres meses en el cargo, pero ha cometido varias pifias con el sensible tema de la narcocultura. Hace unas semanas, en el festejo de la fundación de la ciudad, permitió que el grupo Peso Pluma interpretara un narcocorrido en honor a El Chapo, y hace unos días, en el concierto del cantautor colombiano César López se le hizo fácil posar con una guitarra en forma de fusil AK-47, por lo que muchas voces reclaman su salida y otras advierten que a la otra se va.
Presume diputado trabajo… pero en el gym
Desde Hidalgo, nos comentan que el que anda presumiendo los “buenos resultados de su trabajo” es el diputado local Alejandro Enciso Arellano (PRI), aunque sólo en el gym y no en el Congreso local. Nos relatan que durante la jornada de vacunación contra la influenza en el recinto legislativo, una enfermera le pidió a don Alejandro que se descubriera el brazo, pero como el legislador consideró que no era suficiente, se quitó saco, corbata y hasta camisa para presumir que no son en vano las horas de gimnasio, lo que provocó una que otra mirada traviesa, aunque no faltaron los envidiosos que le recordaron que es tiempo de presumir, pero el trabajo legislativo.