Más Información
Anuncian instalación de 25 albergues en la frontera con EU por amenaza de deportación masiva; Rosa Icela dialoga con gobernadores
Tras nota de EL UNIVERSAL, Senado va por regular venta de drones; darán 40 años a quien los utilice como arma
Publican decreto en el DOF que desaparece a 7 organismos autónomos; Inai, IFT, Coneval, Cofece, entre otros
Tras fallo a favor del maíz transgénico, México permitirá importación; busca prohibir su siembra en el país
Ya extinto el Inai, pide garantizar acceso a la información; reitera intención de participar en diseño de nuevo modelo
Torreón.- De tanto estar viendo y escuchando la temática del Covid-19, René Saucedo, dueño de un puesto de hot dogs y hamburguesas en Torreón, pensó que tendría que idear algo con esa temática: así nació la ‘Coronaburguer’.
“Pensaba ante las bajas ventas que tenía que hacer algo. Estaba curioseando en el teléfono, explorando, viendo que hay muchos pasteles con la temática del Covid-19 y de tanto tiempo viendo, pues dije, vamos a ver, por qué no un pan de hamburguesa”, cuenta René de 39 años.
Pero antes de crear la Coronaburguer, René entró en un bajón emocional y pensó en cerrar debido a la disminución en las ventas. De dos empleados que tenía tuvo que descansar a uno. Tenía el apoyo de la señora que le renta el local y sabía que de alguna forma tenía que mantenerse y trabajar para llevar el sustento a la casa, a la familia que incluye a su esposa y dos hijos.
“Está muy fregadón, está muy difícil la situación. Pero había que sacar algo bueno de lo que estamos viviendo”, cuenta René. Y como muchos otros comerciantes del país en esta emergencia sanitaria, tuvo que idear algo para intentar sobrevivir a la crisis.
Preguntó a la persona que le hace el pan de la posibilidad de aterrizar lo que tenía en mente, hicieron pruebas, hasta que quedó un pan brioche con sus picos en forma de virus y pintado con colorante natural verde que, aclara René, no altera el sabor ni la masa.
Además del pan en forma de virus, a la Coronaburguer le agrega queso gouda, queso cheddar, mozarella, tocino, cebolla morada, salsa bourbon y especialmente espinacas y aderezo de aguacate.
“La gente lo toma bien. Se le hace chistoso. En un principio pensé que a lo mejor alguien se podría molestar, pero no, lo agarran de botana”, platica René. De hecho, Rene me cuenta que quienes más le piden la Coronaburguer últimamente son los doctores. “Uno conoce a sus clientes pero no sé por qué los médicos son los que la piden más”, cuenta.
René y su trabajador son los únicos en la cocina. Él toma órdenes por teléfono, atiende a los clientes que llegan y apoya en la parrilla. Es un martes por la tarde y afortunadamente para René y su negocio Zhunckos, la gente está llamando para hacer pedidos. “Hay veces que no sale nada hasta las 9, 10 de la noche. Hoy sí hay movimiento”, me dice. En el último pedido que atendió por teléfono, una de varias hamburguesas que le encargaron era la Coronaburguer.
Hace tres años, René cambió su trabajo de 15 años como escolta de seguridad por la parrilla. Dice que se cansó de trabajar para otra persona y quiso emprender un negocio propio. Así nació “Hot dogs Zhunckos”, ubicado en un local de la colonia Puerta Real de Torreón.
El fuerte del negocio son los hot dogs, de los cuales tiene mucha variedad de salchichas para ofrecer. Antes solo vendía un tipo de hamburguesa: la grosera. Pero por lo pronto al menú se sumó la Coronaburguer.
René sabe que esta creación de hamburguesa solo será por temporada y que difícilmente pueda seguir. “Es la novedad, y a la gente se le pasa. Sé que no va a durar mucho”, reconoce el comerciante.
Por lo pronto René trata de sobrevivir a una crisis sanitaria y económica. El local es pequeño y toda la comida es para llevar. “Tratamos de atender un cliente a la vez para no propiciar aglomeraciones. La gente está respetando, la gente espera”, asegura el creador de la Coronaburguer.
Y mientras preparan otra Coronaburguer, René asegura que no ha pensado en otra creación de hamburguesa.