Como si quisiera quitarle el estigma de austeridad a la 4T, nos cuentan que quien festejó en grande su triunfo en las urnas, fue el promotor de movimientos agrícolas, Serapio Vargas (Morena-PAS), hoy diputado local electo de Sinaloa y quien celebró con un viaje por Estados Unidos, de Times Square, en New York, a la Casa Blanca, en Washington DC. Pero eso no es todo, nos apuntan, pues don Serapio levantó más de una ceja desde el anuncio de su paseo, cuando en sus redes sociales pidió que le hicieran saber de algunos sinaloenses radicados en EU, para visitarlos. Al final, nos dicen, entre aviones y festejos, lo único cierto es que Vargas empezará su gestión entre críticas, incluso de sus propios votantes, quienes le han cuestionado de dónde salió el dinero para darse ese lujo, si en su campaña hablaba de la austeridad y la falta de fondos para promoverse.
Una monarquía sin corona
Nos comentan que en el municipio guanajuatense de Pueblo Nuevo todo queda en parientes, pues pasan y pasan elecciones, pero el poder queda siempre en las manos de algún integrante de la familia Solórzano Villanueva. Según nos narran, la familia va por su sexta administración seguida, ahora de la mano del alcalde electo, Leonardo Solórzano Villanueva (MC), quien ya fue presidente municipal en dos ocasiones bajo el abrigo del PRI y, ahora, en octubre próximo recibirá la estafeta de su hermana Larisa, quien ocupó el cargo en dos trienios y cuya antecesora fue su hermana Adriana. ¿Será que en tres años la elegida será su consanguínea María del Pilar Solórzano o le tocará a otro hermano?
El caso de Grajales Yuca
Nos platican que en Chiapas un caso que ha llamado la atención, es el del médico Gerardo Grajales Yuca, excandidato de Morena a la alcaldía de Acala, pues no le alcanzó el mecate y fue derrotado en las urnas por el abanderado del partido Chiapas Unido, Rodrigo Trinidad Rosales. El tema, nos dicen, es que tanto Morena como el aspirante auguraban un triunfo, ya que el médico contendió luego de enfrentar un proceso por presunto abuso de autoridad, derivado de un deceso por Covid-19 en el Hospital de Especialidades Vida Mejor, y del que salió librado por la presión social de quienes lo defendieron y acusaron tráfico de influencias en los órganos de justicia, pues el fallecido era nada más y nada menos que el exdirigente del partido Mover a Chiapas, Arturo Ramírez. ¿Será que en política, como en la vida, zapatero a tus zapatos?
El arte de la pelea
Donde parece que todavía están en campañas, nos hacen ver, es en Durango, pues los dimes y diretes siguen, y ahora Morena está reclamando al gobierno estatal que siga sin entregar los casi 58 millones de pesos por el pago de participaciones al municipio de Gómez Palacio, gobernado por la alcaldesa guinda Marina Vitela. En este sentido, nos explican que los morenistas, comenzando por su dirigente estatal, Otniel García, buscan defender lo que creen se ha convertido en su bastión estatal: el municipio de Gómez Palacio, la segunda ciudad más poblada de la entidad, que es gobernada por el PAN. Hay que tener cuidado, nos indican, de pelear con molinos de viento.