Juchitán.— Los cientos de extranjeros que ingresan a territorio oaxaqueño a través del Istmo de Tehuantepec y que buscan continuar con su camino hacia Estados Unidos, se han topado con un incremento en las actitudes xenófobas y de rechazo en su contra, en gran medida alimentadas por las propias autoridades de los municipios que atraviesan en su camino.
Los argumentos de dichas autoridades municipales van desde que son los migrantes quienes han disparado los contagios de enfermedades, que saturan los servicios en detrimento de los pobladores e, incluso, los responsabilizan de un aumento en la incidencia delictiva.
El presidente municipal de Santo Domingo Ingenio, Germain Alvarado López, por ejemplo, pidió a la población que tome distancia de los migrantes, a quienes consideró que son “la principal fuente de contagios” de casos de dengue en ese municipio istmeño.
“Ante el incremento de casos de dengue, zica, chincongunya en nuestro municipio de Santo Domingo Ingenio, hacemos un llamado a las familias de esta localidad a tomar las medidas preventivas y necesarias al tener contacto con los migrantes”, señaló.
En un comunicado, advirtió también que el incremento en el número de migrantes que llegan todos los días a esa población, está rebasando los servicios de Telecom, Western Union, los servicios de salud y baños públicos.
Santo Domingo Ingenio presenta 25 casos de dengue, según las pruebas arrojadas por la Unidad de Diagnóstica Clínica Multifuncional (UDCM), un laboratorio donado por una empresa eólica en mayo pasado.
Sin embargo, funcionarios regionales de Salud, quienes pidieron la reserva de sus identidades porque les prohibieron referirse a temas migratorios, señalaron que en la tabla de casos de dengue no figura el municipio de Santo Domingo Ingenio.
Además, precisaron, la principal fuente de contagio del dengue es la ausencia de acciones preventivas en los hogares y municipios, como “Lava, tapa, voltea y tira”, para mantener patios limpios de criaderos del mosco transmisor.
A ello se suma que desde la semana pasada los migrantes denunciaron que en los municipios de Santo Domingo Zanatepec, Santiago Niltepec y Santo Domingo Ingenio enfrentaban dificultades para cobrar los envíos de dinero de sus familiares.
En Zanatepec, reconoció la presidenta municipal, Tania Isabel Escobar, la oficina de telégrafos Telecom suspendió algunos días sus operaciones por órdenes de su gobierno.
“Pues les pedimos que pusiera horarios restringidos por la multitud de migrantes para que no se perjudicara a la población”, expuso la funcionaria.
Mientras que en Niltepec, desde finales de septiembre de este año, el presidente municipal, Froylán Medina Santos, pidió a la población “cerrarle la puerta a los migrantes”, debido a una denuncia de robo cometido en agravio de una persona de la tercera edad.
Conforme pasan los días y crece el número de migrantes que ingresan al territorio oaxaqueño desde San Pedro Tapanatepec, también se observan actitudes de rechazo y odio hacia ellos.
Pese a que en Juchitán opera un Centro de Movilidad Migratorio, que sólo en octubre facilitó poco más de 71 mil traslados de extranjeros en tránsito, según cifras del gobierno de Oaxaca, los grupos de africanos y migrantes de otros países ocupan desde temprano las tiendas de autoservicio, de conveniencia y otros para cobrar los envíos de dinero, recursos con los que buscan seguir su camino a territorio estadounidense.
Ante ello, extranjeros que cruzan por el Istmo consultados por este diario, denunciaron que algunas autoridades municipales de esta región asumen políticas xenofóbicas.
Al llegar al centro de movilidad los migrantes acusaron que no tuvieron condiciones para recibir los envíos de dinero de sus familiares porque las tiendas estaban cerradas o les niegan el servicio.
Consultada por EL UNIVERSAL, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) dijo que no había recibido quejas sobre el trato que dan autoridades municipales a los extranjeros en tránsito, pero explicó que en sus atribuciones está abrir un expediente de oficio.