Chilpancingo.— Era casi medianoche cuando Fernando llegó a la casa de Kenia, en la comunidad de Tlalquetzalapa, municipio de Copanatoyac, en La Montaña de Guerrero.

El hombre iba borracho; comenzó a pelear con Kenia, después intervino su hermana, Avelina. Los tres discutieron.

Fernando saldó la discusión a balazos. Le disparó a Kenia y después a Avelina, quienes murieron dentro de su casa, frente a sus hijos menores de edad. Fernando, según el reporte de la Fiscalía General del Estado (FGE), huyó tras cometer los dos feminicidios y sigue prófugo.

Así se consumó un caso más en Guerrero. En lo que va del año, han ocurrido 68 homicidios con presunción de feminicidio en todo el estado, de acuerdo con el registro de la Asociación Guerrerense contra la Violencia hacia las Mujeres. De estos asesinatos, 12 fueron cometidos en siete municipios de La Montaña.

Otro caso similar en la zona se presentó el 2 de la mayo, cuando, de acuerdo con el reporte de la policía estatal, alrededor de las 7:00 de la mañana, sobre la carretera que conduce a la comunidad de Potoichán, en Copanatoyac, fueron hallados los cadáveres de dos mujeres.

Los dos cuerpos tenían impactos de bala en la cabeza. A las dos las sacaron de sus domicilios y fueron privadas de su libertad. Fueron identificadas como parientes: suegra y nuera.

La abogada del Centro de Defensa de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Neil Arias Vitinio, informó que desde 2014 hasta 2021 han documentado 100 asesinatos con presunción de feminicidio en la región. Explicó que de esos casos sólo hay seis hombres detenidos, de los cuales apenas dos fueron sentenciados por feminicidio.