La confección de artesanías y manualidades, y la fabricación de artículos de herrería, calzado, prendas de vestir, muebles, sustancias químicas orgánicas, así como el cultivo de hortalizas en los centros penitenciarios del estado, serán comercializadas a través de la constitución de cooperativas, en beneficio de los internos.
El d irector de Prevención y Reinserción Social del estado , Gustavo Romero Rosas, dijo que en el Centro de reclusión de Mazatlán está en operación un taller de costura, con 20 máquinas de coser, con dos turnos, donde ya se diseña y confección de uniformes.
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Señaló que a través de la Secretaria de Economía del Estado se trabaja en la formulación de un acta constitutiva de cooperativas para poder comercializar estos productos, como cloro orgánico, muebles guaraches calzado, los cuales son elaborados en el centro penitenciario de la capital del Estado.
La intención es promover los productos que se fabrican en el interior de los penales del estado, a los cuales se les busca crear su propia marca “ Industria Penitenciaria Sinaloense ”, a fin de que los ciudadanos que los consuman, tengan una referencia del trabajo que se desarrolla por los internos y esto les permita una futura reinserción social por sus habilidades.
Romero Rosas explicó que en el Centro de las Consecuencias Jurídicas del Delito en Culiacán se producen los primeros 200 litros de cloro orgánico, del cual tiene un consumo interno, pero que se proyecta aumentar su producción para su comercialización en el exterior.
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Los estudios que se tienen muestran que este producto, con bajo costo, puede ser usado para desinfectar diversas áreas y el agua, en los casos, cuando se presenten fenómenos naturales, puesto que con solo 5 milímetros de este químico se puede purificar 20 litros de agua.
El funcionario penitenciario comentó que la intención es generar opciones de empleo de los internos y que, a su vez, una vez que estos alcancen su libertad, tengan una opción honesta de vida para ellos y sus familias.
Comentó que los primeros empresarios, han suscrito contratos de financiamiento para los talleres de costura y fabricación de calzado, por lo que se espera que, en breve, se cuente con respaldo económico para el cultivo de las hortalizas en los centros penitenciario.
shgm