Aprueban reestructurar deuda pública de Veracruz

El pleno del Congreso de Veracruz autorizó al gobernador Cuitláhuac García Jiménez reestructurar la deuda pública que asciende a 41 mil millones de pesos , la cual se arrastra de las últimas tres administraciones.

Con 34 votos a favor de Morena, PRI y el Grupo Mixto “Del Lado Correcto de la Historia”, también se le dio luz verde para contratar un monto adicional de deuda por 996 millones de pesos para constituir los fondos de reserva del o los créditos o financiamientos.

Aunque la bancada panista se opuso con 12 votos, el pleno determinó que los financiamientos deben contratarse mediante un proceso competitivo bajo la modalidad de licitación pública con una vigencia de hasta 20 años.

Con la aprobación, se permitirá refinanciar 11 créditos en total, sumando uno al que se comprometió el gobierno de Javier Duarte en 2015 y que no se incluyó en la reestructuración implementada en la administración de Miguel Ángel Yunes.

El secretario de Finanzas y Planeación del gobierno estatal,

José Luis Lima Franco

, aseguró que la reestructuración de la deuda pública permitirá un ahorro de 4 mil 600 millones de pesos, que serán destinados para obra pública.

El funcionario indicó que en la actual administración se podrían ahorrar más de 2 mil 700 millones de pesos y en la siguiente administración durante los primeros tres años habría otra liberación de mil 900 millones de pesos.

Además, buscarán disminuir de 21.5 años a 20 años el pago de la deuda pública de Veracruz, y se abrirá la licitación para la reestructuración a todos los bancos interesados, pues esperan mejorar las tasas de interés al pasar de 1.17 por ciento a 0.90 por ciento.

Actualmente la deuda pública del estado con bancos es de 41 mil 796 millones de pesos, a lo que se debe sumar los pagos pendientes con proveedores y laudos pendientes. Entre las instituciones bancarias se encuentra Banobras, Banorte, Multiva, Interacciones y Santander.

El saldo insoluto de la deuda pública de largo plazo del Gobierno del Estado de Veracruz, al 31 de marzo de 2019, es de 41 mil millones de pesos, de los cuales 4 mil 500 corresponden a un crédito que tiene como fuente de pago al Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas (FAFEF).

Y los restantes 37,268.0 millones de pesos, contratados a una tasa de interés promedio ponderada de la Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio (TIIE) +117 puntos base, con el Fondo General de Participaciones como fuente de pago y un plazo remanente de 252 meses en promedio.

El gobierno estatal recordó que Coahuila logró reestructurar su deuda con una tasa de interés promedio ponderada de TIIE + 96 puntos base (pb) y un plazo promedio de 320 meses; Quintana Roo una TIIE + 86 pb y un plazo promedio de 204 meses; y recientemente Chihuahua, con una tasa de interés promedio ponderada de TIIE + 63 puntos base a un plazo promedio de 240 meses.

El Grupo Legislativo del PAN se opuso a dicha reestructuración al asegurar que la deuda pública aumentará a 56 mil millones de pesos.

La diputada María Josefina Gamboa Torales señaló que la iniciativa del gobernador Cuitláhuac García Jiménez generaría que la deuda pase de 41 mil millones de pesos a 56 mil millones de pesos, lo cual significaría un aumento de 9 mil millones de pesos.

Explicó que aunque la Ley de Disciplina Financiera permite al gobierno reestructurar sin pedir autorización del Congreso siempre que las condiciones de plazo y tasas de interés mejoren, el solo hecho de enviar la solicitud al Congreso, evidencia que la intención es contraria a esos preceptos.

“El esquema de la reestructura en el bienio pasado tenía una clara visión de futuro que imprimía una mayor disciplina en el ejercicio del gasto, que logró dar liquidez y estabilidad a las finanzas lastimadas de Veracruz, al ahorrar en su momento para que en el futuro se pagara mucho menos, caso contrario sucederá con el esquema que hoy propone Morena", dijo.

Advirtió que las próximas administraciones estatales, específicamente a partir del 2029, sufrirán las consecuencias por asumir un alto costo y presión de la deuda, obligándolos incluso a considerar una nueva reestructura en el 2030.

afcl