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A quien le duró muy poco la “cura” de su relación con el gobierno federal, nos dicen, fue al mandatario de Puebla, el morenista Luis Miguel Barbosa Huerta, pues a unos días de haber expresado su total respaldo y “admiración” al presidente Andrés Manuel López Obrador, ahora dejó claro que no asumirá los costos políticos y sociales de la decisión del gobierno federal de adelantar el levantamiento de las medidas de sanidad para enfrentar el Covid-19. En su última conferencia de prensa, nos explican, el morenista rechazó la decisión de López Obrador de endilgar a los gobernadores la toma de decisiones sobre la apertura de sectores económicos, como el de la construcción y el automotriz, y dejó claro que es competencia federal y, por tanto, ha decidido dejar marcada su línea para que cuando haya un repunte de casos de Covid no le vayan a achacar errores. Ese lavado de manos, ni Poncio Pilato lo tuvo, nos señalan.
Sana Distancia, nivel “desaparecidos”
En Morelos, nos cuentan, la pandemia y las crecientes muertes por consumo de alcohol de dudosa procedencia han desatado que grupos ciudadanos busquen fallidamente a diputados federales y senadores que representan al estado, a fin de que gestionen apoyos, créditos y féretros para las víctimas mortales en ambos contextos. Sin embargo, nos mencionan, sin importar color, los legisladores se han hecho “ojo de hormiga”, y para ejemplo, el morenista José Ambrocio Gachuz, quien es el representante en la Cámara Baja por el Quinto Distrito electoral, justo en la región donde se registraron los decesos de personas por el consumo de alcohol adulterado, pero quien de plano no ha asomado las narices ni para ofrecer condolencias. Qué gacho es Gachuz, ya se escucha en su tierra natal.
Se dan de jalones... ¡hasta por internet!
Desde Guerrero nos platican que el decreto por el que a nivel federal se le otorgaron funciones de seguridad pública al Ejército y a la Mariana, provocó una ciberpelea entre los diputados locales, quienes están sesionando de forma virtual. Resulta, nos detallan, que al debatir el decreto presidencial se armaron dos bandos: uno encabezado por los morenistas y otro por los miembros del PRD y PAN, quienes cuestionaron la decisión, al grado de que la panista Guadalupe González aseguró que el Presidente de la República “les está dando un mal uso” a marinos y militares, al utilizarlos “como albañiles y peones”, mientras que en el frente guinda Moisés Reyes acusó que fue un gobierno panista el que militarizó al país y provocó “un lapso sangriento” para Guerrero. Menos mal que todo fue con una webcam de por medio.
Y otros apelan a la cordura
Donde parece que están logrando conciliar, nos mencionan, es en Sinaloa, debido a que hasta ahora no hay detractores a la propuesta de diferir dos meses más la convocatoria que tiene que emitir el Congreso del estado para celebrar las elecciones locales de 2021, donde se elegirá al nuevo gobernador, alcaldes, regidores y diputados locales. De lograr total conciliación, nos mencionan, el Instituto Estatal Electoral, a cargo de Karla Peraza Zazueta, podrá ahorrar algunos gastos, puesto que por al menos dos meses no tendrá que pagar renta de inmuebles ni salarios, en la espera de un aminorado brote de Covid-19. Ya veremos, nos dicen, si de última hora una que otra diferencia no termina por convertir la medicina en otra enfermedad.
