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Cancún.— El primer kilómetro de barreras de contención de sargazo, para evitar que recale en las costas de Cancún estará instalado el 1 de septiembre, informó la empresa Goimar Logística y Servicios, contratada por el gobierno del estado para desviar las masas de algas en el mar y redireccionarlas, aprovechando el sentido natural de la corriente marina.
Durante un recorrido con biólogos y técnicos de la compañía que diseñó el sistema de barreras, se explicó frente a las playas de Cancún que, previo a su instalación, se realizaron estudios para medir la intensidad y dirección de las corrientes marinas, de los vientos, así como el peso del sargazo.
Gustavo Alberto González de la Rosa, encargado del área técnica de la compañía, expuso que los primeros 200 metros de barreras, a 45 grados y 500 metros de la costa, operan ya en la zona de Nizuc, al sur de la zona hotelera e informó que abarcarán un total de 8.3 kilómetros, hacia Punta Cancún; el primer kilómetro estará cubierto el 1 de septiembre.
“El plan es tirar ocho kilómetros 300 metros, de Punta Nizuc a Punta Cancún y hacer una grapa para contener el sargazo en diferentes puntos; esa alga que se contenga en la barrera, será recogida por embarcaciones especiales y se llevará a 45 kilómetros de la costa de Quintana Roo para que la corriente natural y el viento se la lleven”, ahondó.
El total de barreras abarca 27 kilómetros de costa en los municipios de Cancún, Puerto Morelos, Solidaridad, Tulum y Mahahual.
Estos dispositivos y materiales no afectan el desplazamiento de especies marinas en la zona; el diseño de su estructura permite la captura del alga en la superficie marina para, aprovechando el mismo flujo de las corrientes, recolocarla en su hábitat natural sin más afectaciones para las actividades humanas en la zona.
Tampoco impide el paso de fauna marina, porque no se trata de una red, sino de un faldón visible a los peces, que puede nadar debajo sin peligro.
“Se trata de un flotador envuelto con lona de PVC, la cual va vulcanizada; lleva en la parte inferior una malla no agresiva al medioambiente; no es una malla de pesca, sino de nylon que se puede ver. La malla de pesca es para engañar a la vida marina y ésta la hemos estado monitoreando y no hemos tenido problema con ninguna especie”, indicó González de la Rosa.
Por su parte, el oceanólogo Alejandro Bravo detalló que en la zona prevalecen las corrientes más intensas del planeta y que es el viento el que incide en la arribazón del sargazo.
El sistema de vallas, dijo Edgar Rivera, patrono de la embarcación, ha permitido atender un fenómeno que puede afectar severamente la economía de la Península de Yucatán e influir en su equilibrio natural.
Ambos coincidieron en que a partir de la semana próxima, personal de la Semarnat y de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) se mantendrán a bordo de la embarcación para supervisar que los trabajos de instalación cumplan con los lineamientos que impidan la afectación de la vida marina.