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El sacerdote Alejando Solalinde, director del albergue “Hermanos en el camino”, propuso trasladar en camiones a la Ciudad de México, a los dos mil 500 salvadoreños , que se encuentran en un campo de futbol en Matías Romero, Oaxaca.
Ante integrantes de la caravana, Solalinde habló con el director de Pueblos Sin Fronteras, Irineo Mújica , para proponerle a los extranjeros que fueran trasladados en camiones hacia la Ciudad de México y que no lo hicieran a pie o en aventones, como lo han hecho desde que ingresaron a territorio mexicano.
Pero además, lo que se intenta es que los centroamericanos “nadie los obligue a ir a los Estados Unidos, tampoco quedarse (en México) o regresar a su país de origen”, sino que en la Ciudad de México, “puedan realmente recibir la información y que después decidan libremente qué hacer” .
“Queremos acompañarlos. Queremos que se sientan a gusto. Nadie los tiene que estar acarreando o llevando a la fuerza con prisa. Aquí lo que nos interesa es su seguridad que puedan llegar lo más pronto a la Ciudad de México”
, propuso el sacerdote a los integrantes de la última caravana que llegó el viernes por la tarde a Matías Romero, Oaxaca, después de recorrer 200 kilómetros desde Arriaga, Chiapas, el trayecto más largo que han hecho los extranjeros que participan en el éxodo centroamericano.
Además pidió a los salvadoreños q ue voten, si deciden seguir caminando al lado de Pueblos Sin Fronteras, que dirige Irineo Mújica o al lado de la Iglesia católica, de los cónsules y organismos de derechos humanos civiles.
“Nada más yo quiero saber que de una vez digan: ¿en quién confían?, si confían en Pueblos Sin Fronteras, en esta persona de negro que está aquí (Irineo Mújica), pero levanten la mano para saber en quién confían”
.
Solalinde les propuso a los centroamericanos que proporcionen sus datos a organismos de derechos humanos, como identidad y lugar de origen, datos que prometió no serán compartidos al consulado de El Salvador .
“Este es un registro para su seguridad”
, agregó el sacerdote, porque sabe que hay 65 niños que iban en la primera caravana y se perdieron, así como mujeres. “Se están robando a los niños. Cuídenlos mucho” , alertó.
En el improvisado albergue, el sacerdote explicó que se busca proteger a las familias que viajan en la caravana y al momento que aborden los camiones, ninguno irá solo, sino que irán con el acompañamiento de organismos de derechos humanos hasta la capital del país.
Además les sugirió a los extranjeros que se organicen en grupos y nombren a un representante, para que en caso de llevar a cabo una consulta, ellos puedan decidir qué hacer.
Se pretende también que sean los propios integrantes de la Caravana, que digan a dónde quieren ir y luego hacer el traslado con seguridad. “El chiste es sacarlos de aquí”, propuso el sacerdote.
Irineo Mújica negó que él “sea propietario” de los extranjeros del éxodo centroamericano, pero coincidió con el párroco para que lo más antes posible, puedan dejar esta zona porque “el lugar está hostil”.
El activista se quejó por las palabras del sacerdote, ya que por sus palabras, los integrantes de la caravana “me querían linchar”, por lo que pidió que no se debe lanzar acusaciones sin fundamento, “debe tener respeto. Yo jamás lo he hecho, ni le faltaría el respeto” .
Aun no hay hora para que los extranjeros puedan salir en camiones hacia la Ciudad de México .
