Como dicen que “sobre aviso no hay engaño”, nos cuentan que en Aguascalientes alistan para la popular Feria de San Marcos la política de “el que la hace la paga… o la limpia”. Nos detallan que el secretario de Seguridad Pública Municipal, Antonio Martínez Romo, tiene lista una dotación de escobas y jabón para los asistentes que sean captados en flagrancia orinando en el perímetro ferial, donde se prevé que un juez municipal defina si los infractores pagan la falta ya sea con servicio comunitario (de limpieza) o pasan varias horas en los separos de la policía. “Si lo agarramos orinando, [el infractor] tendrá que ir a limpiar el tema que hizo”, sentenció don Antonio. A ver si el respetable evita la pena. ¡Ups!
No promueve, pero le mueve
El que parece que anda de piel sensible en Tabasco, nos comentan, es el gobernador Carlos Manuel Merino Campos (Morena), pues se pasó la semana bateando a los que criticaron el “viajecito” que se aventó el pasado fin de semana a Sonora y Quintana Roo para participar en eventos de su partido. Nos indican que uno de los más feroces críticos fue el senador Juan Manuel Fócil Pérez (PRD), quien condenó que el estado se haya quedado sin gobernador, a lo que don Carlos respondió que sólo “critican los que no hacen nada”, que en su tiempo libre puede hacer lo que quiera y negó estar promoviendo la revocación de mandato, pero remató con que “la gente ya sabe qué hacer; amor con amor se paga para ya saben quién”. En fin, cosas de la 4T.
Mando, en el ojo del huracán
A quien le está lloviendo en su milpita en Zacatecas, nos platican, es al secretario de Seguridad Pública estatal, Adolfo Marín Marín, pues, a pesar de que hace casi cinco meses fue presentado en el cargo por el gobernador David Monreal Ávila (Morena) con el objetivo de “garantizar el Estado de derecho con acciones concretas”, ha quedado a deber. Nos detallan que sus detractores le reprochan que en lo que va del año la inseguridad no ha bajado, van 16 policías asesinados, se han fugado dos reos del penal de Fresnillo y, para acabarla, su corporación padece una crisis por las protestas de policías, quienes exigen su renuncia y hasta tocaron puertas en el Congreso estatal, donde se analiza una solicitud para citar a don Adolfo a comparecer. ¿Qué tal?
¿Tendrán que ir a terapia?
Nos comentan que, en Sinaloa, quienes andan buscando “el hueco” por donde se está vaciando el instituto son los integrantes del Partido Sinaloense (PAS), ante la desbandada de alcaldes y diputados locales a Morena. Nos dicen que la desconfianza apuntó al secretario de Gobierno estatal, Enrique Inzunza Cázarez (Morena), a quien perciben como el artífice del cambio de bandera de varios militantes, como ocurrió con la diputada local Luz Verónica Avilés Rochín, que se pasó a los guindas y por eso el presidente de la Mesa Directiva del Congreso local, Gene René Bojórquez Ruiz (PAS), con poco tacto diplomático, le recriminó a don Enrique que ande jalando agua a su molino. Al parecer, los dos partidos ya no son tan amigos.