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La madruga de ayer falleció Ulises Contreras Sánchez, Lichito, quien era el barman del bar El Caballo Blanco, en Coatzacoalcos, Veracruz, incendiado por un grupo delictivo el pasado 27 de agosto. Con su deceso suman 31 víctimas mortales por ese ataque.
El joven, de 21 años, permanecía en el Hospital de Alta Especialidad de Veracruz, donde se le atendía por tener quemaduras en 90% del cuerpo. A través de las redes sociales, la familia de Lichito solicitó apoyo para cubrir los gastos funerarios.
En estado crítico, uno de los incendiarios. La noche del pasado 27 de agosto, al menos 10 sujetos ingresaron al centro nocturno haciéndose pasar por funcionarios que realizarían una inspección; una vez adentro, ordenaron a los clientes y empleados que se tiraran al piso. A los pocos segundos irrumpió otro grupo, éstos con galones de gasolina y empezaron a rociar el líquido inflamable, después le prendieron fuego.
Ayer, el presidente Andrés Manuel López Obrador, al señalar que se debe apoyar a la juventud, reiteró que un joven de 15 años fue uno de los que rociaron con gasolina el centro nocturno en Coatzacoalcos.
Tras realizar un recorrido por el hospital rural de Tula, municipio de Tamaulipas, reveló que el joven se encuentra con heridas graves, ya que la mitad de su cuerpo se quemó.
“Acaba de haber un crimen horrendo en Coatzacoalcos, uno de los que rociaron la gasolina en ese bar, un joven de 15 años, se quemó la mitad del cuerpo”, dijo. El Presidente sostuvo que su gobierno tiene que ver por los jóvenes, no darles la espalda y atender las causas que originan la inseguridad, la violencia.
***Con información de Misael Zavala