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Jaime Bonilla (Morena) aseguró que tiene la razón y que su mandato como gobernador en Baja California será por cinco años, pero se someterá a la resolución que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determine.
El gobernador electo ofreció ayer una conferencia en la Ciudad de México, en la que acusó a las autoridades electorales de ser las causantes de la “pelea política” sobre la duración de su mandato, que iniciará el 1 de noviembre próximo.
“Dijeron que no había habido convocatoria por cinco años, en el Instituto Nacional Electoral (INE) se equivocaron al informar a la comunidad. La única convocatoria que existe es la del 8 de marzo [de 2019] y es por cinco años, es la convocatoria que leyó el pueblo de Baja California”, defendió.
Bonilla recordó que el domingo pasado se llevó a cabo una consulta en la cual se cuestionó a la ciudadanía sobre la duración del mandato del próximo gobierno estatal.
“La consulta fue criticada por la oposición, pero es mejor preguntar que no preguntar”, expresó.
Acompañado de quien será su secretario de Gobierno, Amador Rodríguez, y de su futuro fiscal, Guillermo Ruiz, Bonilla subrayó que defenderá los cinco años para gobernar Baja California, porque dos años es un periodo que resulta negativo para la entidad; señaló que sus proyectos requieren más tiempo.
“Un gobierno de dos años sería catastrófico, tronaría a Baja California, que ya de por sí la están dejando quebrada, con deudas millonarias con los maestros, la UABC [Universidad Autónoma de Baja California], contratistas y empleados burócratas. El periodo de dos años se acortaría, porque ya en septiembre de 2020 arranca el próximo proceso electoral y todo se afecta”, dijo.
Bonilla también desestimó las resoluciones que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ha emitido sobre este tema, en las que insiste en que su gobierno debe ser de dos años.
“La última instancia es la Suprema Corte de Justicia de la Nación, todo es parte de un proceso. Si no existieran estas instancias, no estaríamos aquí”, apuntó.
Insistió en que su elección fue democrática y la ganó de manera limpia, bajo el conocimiento de que —reiteró— compitió por cinco años, que la convocatoria publicada fue por ese lapso y el INE no la cambió ni tampoco el Tribunal Electoral.
“Hasta ahora no hay publicación que invalide lo local. Las sentencias del tribunal no cambian nada, el tribunal nunca dijo la verdad (…) la constancia de mayoría no dice que [el periodo] es de dos años.
“Yo creo que el Congreso del estado es soberano y en todos los tiempos pueden ellos dictaminar una reforma electoral o de la que sea, todo ello es completamente autónomo y soberano. No ha habido proceso más demócrata que éste.
“No entiendo por qué tanto brinco, si el piso está tan parejito”, expresó el morenista.
