“En Oaxaca #YaEsLey”. Así anunció el movimiento Marea Verde la aprobación de la reforma penal con la cual se dejará de castigar con prisión a una mujer que interrumpa su embarazo antes de la semana 12 de gestación.
Con pañuelos verdes en mano, las activistas celebraron en la explanada del recinto legislativo de San Raymundo Jalpan, lugar donde Oaxaca se convirtió en el segundo estado que legisla a favor de las mujeres.
A 12 años de la despenalización del aborto en la Ciudad de México, el colectivo que en repetidas ocasiones ha salido a exigir que no se criminalice a las mujeres por ejercer el derecho de decidir sobre su cuerpo, calificó la aprobación como un “gran logro colectivo”.
Para las mujeres de diversos sectores, la aprobación del proyecto presentado por Morena significa la consolidación de una legislación muy anhelada, un tema de justicia.
El primer paso, dicen, para exigir la reforma constitucional sobre el tema, y que se otorgue amnistía para las mujeres que enfrentan procesos legales por haber abortado. Sólo de 2013 a 2016 en Oaxaca sumaron 20 casos.
“No estamos de acuerdo con el término amnistía, porque las mujeres nunca debieron estar presas, ¡jamás! Se les debe una disculpa pública y una indemnización por atentar contra sus derechos humanos elementales… pero bueno, así son las leyes”, resaltaron.
La decisión de los legisladores, sostienen, marca un antes y un después en la historia de las mujeres, “significa que la lucha comienza a dar sus primeros frutos después de 50 años de salir a gritar a las calles que nuestro cuerpo es nuestro”.
Los retos. Tras abrazarse y fundirse en gozo al grito de “hay que abortar a este sistema patriarcal” y ondear por todo lo alto pañuelos y pancartas en vivos verdes, las integrantes de la marea reflexionan que las modificaciones legales significan libertades, pero también retos, sobre todo para el sector Salud.
“El gremio médico no está capacitado; ni siquiera interesado en capacitarse. En derechos humanos han faltado a su ética médica al dar las vergonzosas declaraciones moralistas”.
Explican que la despenalización es sólo el comienzo de un largo, muy largo camino que incluye que las personas tienen que “reeducarse, dejar de estigmatizar el aborto, falta mucha educación sexual... nos queda aún un camino muy largo.
“Para ellos [diputados y grupos opositores], las mujeres seguimos siendo un voto nada más. Nosotras somos titulares de derechos humanos y esos no se lleva a consulta ni merece un ‘parlamento abierto’, pues está visto que sólo abren la puerta a quienes cargan un discurso religioso en la boca y una venda en los ojos”, reprobaron.
Antes de que se alcanzara esta decisión histórica, Marea Verde había convocado este 28-S a mujeres de todas las trincheras a unirse, armadas con su “justa rabia”, al Día de Acción Global por el Acceso al Aborto Legal Seguro y Gratuito. Tras la decisión del Congreso, se espera que las manifestaciones para ese día sucedan con ánimo de festejo.