Como figura pública, el locutor Toño Esquinca siente la responsabilidad de seguir llevando un mensaje positivo a sus seguidores, así como lo ha hecho durante varios años.
“Creo que es mi verdadera vocación, mi verdadero trabajo con el universo porque todos estamos destinados a dejar algo mejor a como lo encontramos y a trascender”, dice en entrevista.
“Para lo que venimos a la vida es para sembrar un árbol que sabemos que nunca vamos a ver crecido ni vamos a disfrutar de sus frutos ni de su sombra, pero dejar algo mejor de como lo encontré y que van a gozar otros”.
El comunicador considera que actualmente la sociedad necesita más que nunca creer en algo y regresar a los valores y principios que son fundamentales para partir hacia una estética que nos permita admirar el mundo y querer verlo bien.
Explica que de ahí se llega al civismo y posteriormente a la espiritualidad, tema del que en diversas ocasiones ha hablado no sólo a través de su programa de radio, sino más recientemente con la reedición de su libro Plan de vuelo.
“Nos falta muchísimo tiempo para volver a tener valores y me refiero a los básicos del ser humamano: la honestidad, verdad, amor, respeto, unidad, camaradería, empatía, esperanza, fe. Valores universales”, comparte.
“Lo que más le falta ahorita a la sociedad, al mundo entero, es volver a tener valores y saber cuál es el camino correcto, no el que diga yo o un gurú, el camino es uno y es el de la plenitud, bienestar, felicidad y amor y todos buscamos eso”, explica.
Esquinca detalla que aunque en un primer momento el libro en el que habla de temas como los chakras, el aura y los centros energéticos fue lanzado hace 10 años, ha comprobado que es verdad lo que habla en él. Para la nueva edición, quitó cosas que consideraba paja y añadió conceptos de la actualidad. A la par de este lanzamiento, adelanta que el 21 de noviembre se estrenará en la plataforma YouTube como parte de la celebración de sus 25 años de trayectoria.
“Fue difícil animarme porque yo no soy muy visual, no es mi terreno pero todo va evolucionando y tengo que entrar. Me estaba resistiendo hasta que las circunstancias me obligaron a hacerlo. Llego a estos 25 muy agradecido con la vida porque he tenido gracias a Dios muchas satisfacciones”, asegura.