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Que en menos de dos años se hayan montado obras con temática LGBT+, como The prom o Torch song, y que esté por estrenarse Todo el mundo habla de Jamie, es para el director Alejandro Villalobos señal de apertura en el público para tocar el tema en el escenario, pero aún hay camino por andar.
“Hay núcleos en la sociedad que están muy abiertos y esperando este tipo de propuestas, pero para otros les resulta demasiado ajenas y las rechaza, reaccionan distinto, pero considero que no hay que quitar el dedo del renglón para permitirle a la gente ver otras perspectivas al respecto”, dijo Alejandro Villalobos, director de Todo el mundo habla de Jamie.
Villalobos dijo que esta historia tiene la virtud de poder conquistar a la gente que sólo va al teatro por diversión, no sólo por el show que brinda, también por el mensaje poderoso que tiene y que puede cambiar la perspectiva sobre la diversidad.
“Habla de resiliencia, de empoderamiento, de sobresalir en la sociedad sin importar lo que el entorno diga, para lograr tu sueño”.
Esta obra fue creada por Tom MacRae y se basa en la historia real de Jamie Campbell, que a los 16 años decidió convertirse en una drag queen y revelar su homosexualidad al mundo sin miedo al qué dirán, con el apoyo de su incondicional mamá.
El director explicó que esta versión, que estrenará el 14 de abril en el Teatro Manolo Fábregas, es completamente diferente a la que se ha presentado en Londres, lo que incluye desde la adaptación hasta la escenografía, que han estado en manos mexicanas.
“Ha sido una curva de aprendizaje muy amplia, ya que es un monstruo enorme, con 30 actores, técnicos, músicos, es una locura, el desafío es cómo lograr que tu visión como director se logre, donde todos tienen algo que aportar, pero tienes que conservar la idea original”, dijo Alejandro Villalobos.
El director define a este musical como un gran espectáculo, que incluye canciones, bailarines y música en vivo, y la producción lo hace atractivo, con el uso de la mejor tecnología en iluminación y sonido.
