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Una de las razones del éxito de Luis Miguel: La serie es el hecho de abordar tanto su vida personal como profesional sin tabúes, explica la productora Carla González y el director Beto Hinojosa.
Ambos coinciden en que por primera vez se cuenta la historia de un personaje único con una vida llena de sacrificios y envuelta en el hermetismo. Y es el propio artista, a través de la serie, quien despeja los rumores que lo rodearon y cuenta su historia.
“Luis Miguel es un ser sumamente carismático, encantador, con una vida única y creo que la serie muestra a un personaje tridimensional que tomó decisiones, no buenas ni malas, sólo decisiones. Es un personaje que en este primera temporada se muestra cómo pasa de niño a adulto en poco tiempo, que se saltó muchas etapas”, explicó Hinojosa a EL UNIVERSAL.
Para Carla, una de las virtudes de esta primera temporada es que no hay temas tabúes, situación que sorprendió a los fans.
“Todos los temas se tocan, hasta aquellos que se pensaban que no. Hablamos de la vida profesional y de la personal, son líneas que se van entretejiendo y eso se vuelve muy atractivo para el público”.
Entre los temas que esta semana mostró el quinto capítulo de la serie fue la faceta en la que el intérprete de “No sé tú” comenzó una vida de excesos, sin embargo, para Hinojosa esta etapa no es lo más importante sobre el cantante.
“Lo de las drogas, el alcohol, las viejas y los excesos es lo de menos; si a cualquiera lo hubieran grabando de joven, pues no es nada que algunos hayamos hecho... Lo cabrón con Luis Miguel son los sacrificios que la familia va haciendo como ente para lograr que el pequeño tenga éxito.
“Pocas personas estarían dispuestas a hacer lo que él hizo para lograr la fama”.
El niño que conocí. La primera temporada, que actualmente se transmite por Telemundo y Netflix, cuenta el nacimiento de una estrella siendo niño hasta su juventud y que vieron de cerca periodistas como Jesús Gallegos.
“El Luis Miguel que conocí era un jovencito puberto de 11 años, ya tenía el primer disco grabado pero todavía no salía al mercado. Como en ese entonces no era famoso, era un chamaquito sin ningún prejuicio de nada, ya cuando vino la fama le gustaba ir a McDonalds, le gustaba cocinar, preparaba milanesas, lo aprendió de su tío José Gallego”, recuerda en ex director de la revista TVyNovelas.
Gallegos describe a aquel Luis Miguel como un niño “bastante alegre, abierto, saludaba con mucha alegría. Decía ‘picha’ como su padre”.
Cuando el cantante cumplió 13 años, recuerda, Luis Rey, su papá y principal impulsor de su carrera, le llevó mariachi.
“Es la primera vez que cantó ‘Cucurrucucú paloma” de una forma extraordinaria en la casa que tenían en Tecamachalco. Luego, cuando cumplió 15 años, le regaló un instrumento musical”.
Gallegos trae al presente aquella ceremonia en la que le entregó un premio al cantante, en los tiempos de “La incondicional” y, tal como se narra en la serie, no llegó acompañdo de su novia Mariana Yazbek por impedimiento de su padre.
“Luis le dio una información (a Mariana) mal intencionada. A él no le gustaba para nada la relación con Mariana, veía que había influencia de ella en la conducta de Luis Miguel”, explica.
A Luis Rey también lo trató. Dice que era bajito, de 1.56 metros,. “Se compraba botas de cinco centímetros porque era chaparrito”.