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Una vez más Jenni Rivera será la protagonista de una serie, esta vez a través de la mirada y la memoria de su amiga y socia la periodista Laura Lucio, que llevará su libro Una vida loca a la televisión de la mano de Azul Siete, la casa productora de Alberto Santini Lara, quien durante un tiempo fue director general de Azteca 13 y Azteca Novelas.
“La idea es estar cercanos a los recuerdos que Laura tiene con Jenni, vamos a respetar eso, me imagino que algunos temas van a ser fuertes pero es lo que es; creo que las vivencias de Laura honran a Jenni, pero lo que se tenga que hablar se hablará”, dijo Alberto Santini.
Sobre quien sería la actriz que podría protagonizar esta serie, Santini señaló que aún no hay un nombre pero han pensado en figuras como Alicia Machado, Gabriela Spanic, e incluso sus hijas Chiquis y Jenicka, y que ya trabajan en ello porque esperan estrenar esta serie a principios de 2020, aún no saben si por alguna plataforma digital o cadena de tv.
La escritora explicó que a diferencia del libro Inquebrantable, la autobiografía de La diva de la banda, Una vida loca se trata de las anécdotas que ella vivió junto a Jenni como amiga, productora y socia.
“Existe la libre expresión y yo voy a contar mi historia con Jenni”.
Lucio señaló que su libro se compone de 20 capítulos, cada uno es una historia, por eso va a decidir junto a Alberto Santini, cuál de éstas serán tomadas en cuenta para el documental, como la del distanciamiento entre Jenni y Chiquis, de la cual Laura explicó que, como ya lo dijo en su libro, la verdadera razón por la que se peleó con su hija mayor fue porque encontró en el teléfono de una amiga cercana llamada Elena, fotos de su primogénita desnuda, algo que le dolió mucho porque esta mujer tenía las puertas abiertas de la casa de la Gran Señora; el problema con su entonces esposo Esteban Loaiza fue porque puso en sobreaviso a ambas mujeres cuando Jenni decidió confrontarlas.
Sobre la posible relación de Jenni con un cartel de la droga, y la humillación que supuestamente sufrió por parte de Edgar Valdez Villarreal, La Barbie, en una de sus fiestas, la periodista aseguró firmemente:
“Eso nunca sucedió, yo no sé qué enemigo se esconde por ahí ¿Creen que Jenni era tan dejada para que la maltrataran, la humillaran? Lo que sí sé es que Jenni trabajaba cada fin de semana en lugares muy públicos, para el domingo o lunes ya estaba viajando para su casa en Los Ángeles; Jenni no tenía necesidad de ir a ningún lado por dinero, porque ganaba mucho”.