A punto de estrenar la serie documental Cuando conocí al Chapo, la actriz mexicana Kate del Castillo dijo que contar su versión de lo sucedido con el narcotraficante, en primera persona y frente a la cámara, fue “una catarsis” y que lo hizo por su “paz mental”.
“La verdad es que de este tema estoy que vomito, pero cuando me lo ofreció Netflix también me di cuenta, y lo consulté con mis papás y mis abogados, que está bueno tener una plataforma así para poder hablar de cosas que no pude hablar y que nadie sabe, y explicar un poco cómo sucedieron las cosas y el por qué decidir hacer lo que hice”, relató en una entrevista telefónica.
“Para mí fue una catarsis. Lo hice, la verdad y más que nada, por mi paz mental”, remató.
El viernes 20 de octubre llegará Cuando conocí al Chapo, una serie documental de tres capítulos en la que Del Castillo detalla los pormenores de su controvertido encuentro con el narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán y la polémica, con investigaciones judiciales de por medio, que llevó a la actriz a residir de manera permanente en Estados Unidos.
La protagonista de La reina del sur aseguró que con este proyecto no busca el perdón público, pero sí un trato digno tras haberse sentido perseguida por las autoridades mexicanas.
“No estoy pidiendo que a nadie le caiga bien, que aplaudan lo que hice, ni mucho menos, pero sí que no se me condene porque no hice ningún crimen”, afirmó.
El escándalo vio la luz el 9 de enero de 2016, cuando la revista Rolling Stone publicó un reportaje de Sean Penn sobre una reunión que mantuvo con El Chapo Guzmán en octubre de 2015 y en el que el actor estadounidense aseguraba que ese encuentro había sido propiciado por Del Castillo, a quien el capo había pedido que rodara una película sobre su vida.
“Nunca me sentí amenazada por él. Lo que me dio miedo y mi pesadilla fue después.
“Tampoco es que el viaje fuera una caminata y ya, pero sentía al menos que estaba protegida, que el señor Guzmán me iba a proteger siendo yo su invitada y una mujer en la que confió”, añadió la actriz, quien durante meses se mandó mensajes telefónicos con los abogados de El Chapo.
Las autoridades mexicanas, que aseguraron que el deseo del narcotraficante de rodar un filme sobre su vida fue una de las causas que condujeron a su captura, investigó a Del Castillo para esclarecer si había recibido dinero de Guzmán para su marca de tequila o la producción del filme, pero ese caso fue finalmente cerrado.
“De mi situación, la única culpable soy yo. Me hago responsable ciento por ciento de lo que hice. Pero me quisieron castigar de una u otra manera”.