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Christian Ahumada ha encontrado en su trabajo como imitador la oportunidad de convertirse en personajes que van desde el deporte hasta la política. Sin embargo, considera que es una profesión que en México no tiene demasiados foros.
“Desgraciadamente en nuestro país son pocos los espacios que se les dan a los imitadores. Por ejemplo, en Estados Unidos está Saturday night live, que lleva muchos años al aire y de ese programa han salido los mejores comediantes de Estados Unidos.
“Eso es lo que intenta hacer La parodia ahora, porque realmente el nicho que tenemos como imitadores es muy chiquito”, explica.
El actor considera que gracias a programas como La parodia y El privilegio de mandar es que pueden desarrollarse porque si no, “¿qué espacio tendríamos?”, cuestiona.
Lo que lamenta es que la barra de comedia esté más cargada de sitcoms.
“Todos los demás programas de la barra son comedias de situación. No hay ese programa de sketches”.
Para Ahumada, imitadores como Gilberto Gless abrieron el camino a otros como él. Considera que actualmente uno de los mejores en la escena es Pierre Ángelo, al ser capaz de crear personajes como Diego Luna y Eugenio Derbez.
Rompe fronteras. El comediante tuvo la oportunidad de probar también con el universo de los deportes al recibir la invitación para sumarse al equipo de La jugada del verano con personajes como Tuca Ferreti, Toño de Valdés y Brozo, que ya no es de Televisa.
Luego de trabajar tres semanas recibió la invitación para regresar en la cobertura de los Juegos Panamericanos con nuevos personajes.
“Feliz porque esto lo arranco primero Dios el 26 de julio. Me siento muy bendecido por todo lo que está pasando en mi carrera, estoy tocando otros lugares donde no había aparecido, ya nada más me falta vender pozole los domingos”, bromea.