“Lo único que lamento es que Televisa me haya olvidado de las telenovelas, ya llevo bastante tiempo de no hacerlas. He ido a tocar puertas dignamente”, señaló el actor.
En entrevista, Carlos Bonavides dijo que tiene la suficiente fortaleza para continuar trabajando, pues considera que tiene mucho potencial para cualquier proyecto.
“Espero que pronto encuentre una respuesta, pero yo sigo trabajando, yo no me dejo, si es necesario estoy dispuesto a entrarle a todo porque todavía estoy fuerte, sano, incluso me gustaría aunque sea modestamente llevarle una ayuda a la Casa del actor”.
Acerca de esta residencia de descanso para los artistas retirados de la tercera edad, el histrión que forma parte del elenco de la serie "Como dice el dicho" aclaró que no planea ingresar ahí, pero tampoco descarta la idea si no tiene otra opción.
“Quién sabe lo que Dios diga, pero ahorita estoy manteniendo a mi familia, trabajando, aunque modestamente, pero estoy trabajando, estoy en la obra de Luis de Alba, Benito Castro, Alejandro Suárez, César Bono y yo”.
¿Por qué será que las queremos tanto?, escrito por Daniel Datola y que estuvo en el Teatro de los Insurgentes de la Ciudad de México durante cinco semanas, se presentará a fines de este mes en Tijuana y Mexicali.
Bonavides habla de alcoholismo y drogadicción
Dentro de su agenda de trabajo, agregó el actor, está dar pláticas de control de alcoholismo y de drogadicción, luego de haber padecido estas adicciones, además de que lo acaban de contratar para participar en la Feria del Libro de Ecatepec.
A Bonavides dice preocuparle mucho el problema económico por el que pasa la Casa del Actor, luego de que la Asociación Nacional de Actores (ANDA) dejara de proveerle recursos, según han señalado actores como Jorge Ortiz de Pinedo.
“Ya tengo la edad para pertenecer a la Casa del Actor, espero seguir trabajando el tiempo que Dios quiera; los viejitos que están ahí dieron toda su vida a la actuación, sacrificaron toda su vida, vivieron ofreciendo su actividad para divertir al público.
“Los únicos que están sufriendo son los viejitos porque con dinero baila el perro y sin dinero bailamos como perros, tiene que arreglarse eso inmediatamente porque es una indignidad que no atendamos a los compañeros, tenemos que hacer todos los esfuerzos para ayudarlos, para que la casa se mantenga firme”.
Comentó que él no tiene que hablar nada mal de la ANDA, pues dijo que lo han atendido bien: lleva cuatro operaciones y espera que sus colegas reciban el mismo nivel de cuidados.